Ya veo que el verano está siendo prolífico en esto de los mensajes. Hasta el tontainas de mi primo Jesús se ha permitido deleitarnos con alguna de sus fotos que las guarda como si fuera el tesoro de Sierra Madre. Gracias majo y hasta cuando quieras. En cuanto a Gustavo, en primer lugar debo decirte que me produce enorme tristeza que Blacos sea cada vez más pequeño y que en invierno aún más. Lo de la repoblación empezó como una broma pero parece que no se entendió así. Ha habido gente con tus mismas inquietudes que ha encontrado acomodo en pueblos de alrededor, anque tu perfil no parece ajustarse mucho a las necesidades de la zona. Para enseñar a cocinar tiene que haber alumnos y para degustar los platos hay que encontrar comensales y las dos cosas son difíciles en Blacos. Aunque siempre cabe el recurso de agrupar las enseñanzas entre pueblos de la zona, algo que depende del ayuntamiento y no de sus vecinos o habitantes. Lo que si te garantiao, Gsutavo, es la hospitalidad de los sorianos lejos de cualquier atisbo de racismo o xenofobia como demuestra un simple paseo pro sus calles o una ronda de cañas por sus bares. Yo en tu lugar no desistiría aunque, como digo, tus posibilidades dependen más de las instituciones que de los intereses o las ilusiones de los que queremos que nuestro pueblo no desaparezca.
Yo también recuerdo la oposición y en algunso casos la crispación que produjo el cambio de fechas en las fiestas y lo entiendo auunque no comparta muchas de las actuaciones y descalificacioens que acompañaron a esta decisión. Jamás he oído hablar de que la idea naciera en la plaza ni de gente relacionada con los que vivimos en la Plaza y yo en aquellos tiempos estaba en el pueblo desde mayo hasta septiembre. Creo que la idea surgió en otro lugar más pequeños y entre gentes que pasaban buena parte o todo el año en el pueblo. Si no recuerdo mal se hizo al final una votacióbn y yo no recuerdo que votáramos nadie no empadronado, pero esto no lo tengo muy claro.
Lo que si nació en la plaza, y de ahí puede venir la confusión, fue lo de organizar todos los años una cena el sábado de feistas entre un grupo de gente que recorríamos fiestas y conciertos de otros pueblos. Una idea que nació de cuatro sorianos, tres de ellos vecinos del pueblo, y que desembocó en la peña del sombrero, maliciosamente llamada por algunos la peña de los vascos, incluso pro algunos de raicez y futuro euskaldun. Pero eso es otra historia.
Una peña que está a punto de cumplir sus bodas de plata por lo que estanos pensando en el programa de celebración. Una peña por cierto que no es un grupo cerrado, sino una asociación abierta a quien quiera, lo demuestran las últimas incorporaciones. Es tan abierta que incluso hay gente que disfruta de ella aunque luego hable de la misma como algo ajeno. Y ya estamos dando vueltas al difcíl compromiso en el que nos han puesto de organizar las fiestas de 2.011. Esperamos estar a la altura de los de este año, algo que no será nada fácil. LO de la fiesta de 2.010 es otra historia... adiós
Yo también recuerdo la oposición y en algunso casos la crispación que produjo el cambio de fechas en las fiestas y lo entiendo auunque no comparta muchas de las actuaciones y descalificacioens que acompañaron a esta decisión. Jamás he oído hablar de que la idea naciera en la plaza ni de gente relacionada con los que vivimos en la Plaza y yo en aquellos tiempos estaba en el pueblo desde mayo hasta septiembre. Creo que la idea surgió en otro lugar más pequeños y entre gentes que pasaban buena parte o todo el año en el pueblo. Si no recuerdo mal se hizo al final una votacióbn y yo no recuerdo que votáramos nadie no empadronado, pero esto no lo tengo muy claro.
Lo que si nació en la plaza, y de ahí puede venir la confusión, fue lo de organizar todos los años una cena el sábado de feistas entre un grupo de gente que recorríamos fiestas y conciertos de otros pueblos. Una idea que nació de cuatro sorianos, tres de ellos vecinos del pueblo, y que desembocó en la peña del sombrero, maliciosamente llamada por algunos la peña de los vascos, incluso pro algunos de raicez y futuro euskaldun. Pero eso es otra historia.
Una peña que está a punto de cumplir sus bodas de plata por lo que estanos pensando en el programa de celebración. Una peña por cierto que no es un grupo cerrado, sino una asociación abierta a quien quiera, lo demuestran las últimas incorporaciones. Es tan abierta que incluso hay gente que disfruta de ella aunque luego hable de la misma como algo ajeno. Y ya estamos dando vueltas al difcíl compromiso en el que nos han puesto de organizar las fiestas de 2.011. Esperamos estar a la altura de los de este año, algo que no será nada fácil. LO de la fiesta de 2.010 es otra historia... adiós