seguro que lo que escribí el otro día en esta pagina os pareció, por lo menos raro, pero era algo que necesitaba apuntar, porque realmente me preocupa. si no sabéis de que va, os lo contare cuando nos veamos.
De momento estamos sobreviviendo a las bajas temperaturas, por algo aquí nacimos, y aquí nos curtimos. Feliz navidad, y un saludo a todos.
De momento estamos sobreviviendo a las bajas temperaturas, por algo aquí nacimos, y aquí nos curtimos. Feliz navidad, y un saludo a todos.
Querida Lola. Escribir no deja de ser un impulso. Un impulso físico que siempre esconde una idea, un deseo o en tu caso lo que esconde es una preocupación. Y como todo impulso, el de escribir también es muchas veces un impulso irreflexivo, espontáneo y sincero. Luego, ya en frío, se empieza a pensar y dar vueltas a esa idea y descubres que casi nunca estás de acuerdo, o totalmente de acuerdo con ella. En este mundo todo, hasta las ideas, tienen muchas aristas, que siempre quermos pulir para dar paso a una superficie limpia y llana. Y muchas veces ahí está el error, porque la sinceridad no es amiga del miedo y cuando nos dejamos llevar por ella rozamos lo más auténtico de nosotros mismos. Tus frases nacen de una preocupación, de una preocupación tan sincera como el impulso que te lleva a escribirla. Eso de dar explicaciones está muy bien, pero siempre que esas explicaciones no se entiendan como justificaciones. Porque el que se justifica cae en el error de sentirse culpable o hacer que los demás lo vean culpable, que todavía es peor. Yo sólo voy a decirte una cosas. Que si la sinceridad de tu impulso llegara tan lejos como el temor que defines, quizás alguien por el camino se dejaría contagiar 6y la preocupación se convertiría en una epidemia de solidaridad. Es lo que tienen los deseos, que los defines a tu antojo.Ánimo.