Vaya panda de cabrone... Me habían dicho que este era el nuevo ayuntamiento. No espabilo, me lo creo todo y de eso se aprovecha la gente. Claro, como soy de pueblo. Ya he visto la entrega del bastón de mando. A rey muerto rey puesto. Lo deja uno de la peña y lo recoge uno de la familia, tendría que estar contento, pues no. Me siento como Calimero, un primo alcalde, un primo estruja letras, otro jubilado y más feliz que una perdiz y yo “ferroviario”, vaya castaña. Con que cara me presento yo, este año, en el pueblo, pues con la cara del primo mindungui. Menos mal que soy de al lado de Bilbao y lo superaré. Enhorabuena, primo, espero que, por lo menos, me dejes entrar en el pueblo. Un abrazote.