Por eso de que, " de bien nacido es ser agradecido" no quiero que se me olvide decirle al último molinero que es para mí un halago sus palabras sobre la Misa del Galllo en Blacos. Aunque no estoy del todo de acuerdo con él cuando se refiere a que es lo menos que se puede esperar de una persona que aprendió a leer en la Fuente del Santo. Es cierto que el lugar marca pero tengo que reconocer que todo, absolutamente todo el mérito, de mi primera inmersión cultural es de la teniente O´Neill. Bueno en aquellos años todavía no había alcanzado el grado de teniente, creo que estaba opositando para ser sargento y por ello me utilizaba para entrenar su insistencia, su perseverancia y su impaciencia que, por otro lado, era la cara más amable de su disciplina espartana y de sus refinadas técnicas de control y de persuasión para que yo acabara haciendo siempre lo que ella decía. No había lugar para la réplica y mucho menos para la negación o a la duda. Había que hacerlo porque así lo establecían sus dotes de mando. En su descargo debo decir que nunca utilizó el arresto o la suspensión de vacaciones para convencerme. No necesitaba llegar a la tortura sicológica, porque mucho antes ya había conseguido sus objetivos. Estas enseñanzas además, me vinieron muy bien para el futuro porque estaba preparado para hacer frente a cualquier maestro o profesor por muy exigente que fuera. Y es que yo llegaba entrenado en los duros páramos del monte de Blacos.
Y en segundo lugar también debo agradecer las palabras de un poco más bajo sobre mi aportación a esta página y la posibilidad de recopilar todos mis escritos. Pero sería un insoportable ejercicio de ególatra que yo propusiera a la comisión de fiesta de la que formo parte que utilizara esos escritos para hacer un pequeño libro y venderlo como una aportación al presupuesto festivo. En serio, me parecería tan narcisista que ni se me ha pasado por la cabeza jamás proponérselo a nadie. La gente de Blacos que ama la fiesta de Blacos ya hace muchos esfuerzos como para que yo indirectamente les diga que me compren algo escrito por mí. Y menos cuando pueden entrar en esta página y leerlos cuando les dé la gana, sin tener que buscar un sitio donde guardar el libro y limpiarle el polvo de vez en cuando. Pero dicho esto, también te digo que no tengo ningún inconveniente en que se usen mis textos para algo que tenga que ver con mi pueblo y sus gentes. Pensándolo bien, lo agradecería porque de esa manera igual conseguía por fin que le pusieran mi nombre a una calle de Blacos, que como todos sabéis es un objetivo que persigo desde el siglo pasado con muy escasa fortuna. Ahí sí que aceptaría mi ego, porque el libro se olvida enseguida, pero la calle se recuerda por lo menos hasta que aguante la placa con el nombre.
Y en segundo lugar también debo agradecer las palabras de un poco más bajo sobre mi aportación a esta página y la posibilidad de recopilar todos mis escritos. Pero sería un insoportable ejercicio de ególatra que yo propusiera a la comisión de fiesta de la que formo parte que utilizara esos escritos para hacer un pequeño libro y venderlo como una aportación al presupuesto festivo. En serio, me parecería tan narcisista que ni se me ha pasado por la cabeza jamás proponérselo a nadie. La gente de Blacos que ama la fiesta de Blacos ya hace muchos esfuerzos como para que yo indirectamente les diga que me compren algo escrito por mí. Y menos cuando pueden entrar en esta página y leerlos cuando les dé la gana, sin tener que buscar un sitio donde guardar el libro y limpiarle el polvo de vez en cuando. Pero dicho esto, también te digo que no tengo ningún inconveniente en que se usen mis textos para algo que tenga que ver con mi pueblo y sus gentes. Pensándolo bien, lo agradecería porque de esa manera igual conseguía por fin que le pusieran mi nombre a una calle de Blacos, que como todos sabéis es un objetivo que persigo desde el siglo pasado con muy escasa fortuna. Ahí sí que aceptaría mi ego, porque el libro se olvida enseguida, pero la calle se recuerda por lo menos hasta que aguante la placa con el nombre.