A vuestra entera disposición
He esperado unos días en contestar. Para que fuera calando el mensaje y la gente se diera por aludida. Pero bueno no me importa ser el primero en este foro.
Que sepáis que me tenéis a vuestra absoluta disposición, para lo que sea, para lo que haga falta, en cualquier momento, a cualquier hora y a cualquier precio. Pero antes de que os hagáis unas expectativas demasiado amplias, os debo de hacer una serie de aclaraciones. Seguro que en la comisión hay más de uno que no me conoce de nada, otros que me conocen pocotirandoacasiná, otros que me ven de vez en cuando por el pueblo, y alguno que otro que sí que sabe algo más de mí o de mi vida, aunque sea de lejos. Sea de una u otra forma, y para frenar esa ilusión de haber encontrado un fiel colaborador, os tengo que decir, en primer lugar que si hubiera un campeonato del mundo de vagos tendría serias posibilidades de conseguir una medalla. A mí no me incentivan ni los retos profesionales, ni mucho menos los esfuerzos físicos innecesarios… bueno los necesarios tampoco. Yo soy de esas personas que con un botijo y un trozo de pan, me puedo pegar todo el verano sentado a la sombra, mirando al horizonte y sin aburrirme un segundo. Se me da mucho mejor la idea bohemia de la vida, el trazar planes, el pensar en proyectos, en buscar a la persona adecuada para llevarlos a cabo,…( siempre que no sea yo claro). Por eso antes de que haya malos entendidos y penséis en mi como un peón de brega para el trabajo de las fiestas, ya os adelanto que no, que eso no.
Ahora bien, me ofrezco como promotor de un cuadro flamenco para alegraros la sobremesa del vermut. Ahí mis amigos y yo tenemos ya ciertas tablas, un prestigio ganado a pulso y un caché de lo más asequible. Si alguien tiene dudas que se vea el concierto de año nuevo del año pasado. Tiene como tres millones de likes en todas las redes sociales, y nos han ofrecido seis veces grabar un disco. Después de darle muchas vueltas, y estudiar los pros y los contras, he decidido que yo tocaré el cajón. Es un ritmo fácil, casi sin aprendizaje y consiste básicamente en golpear con las manos un trozo de madera. Y lo mejor de todo, he visto muchos vídeos, y en todos el que toca el cajón lo hace… sentado. Eso se adapta perfectamente a mi alergia al esfuerzo. Para tocar las palmas y taconear de pie, os ofrezco a mi primo El Baraka. Aunque ha nacido en Barakaldo, por sus venas corre sangre flamenca, es puro nervio y tiene el ritmo en su adn. Además lleva varios años viendo la feria de abril en la ETB1. Aunque cantan en vasco el Baraka lo entiende perfectamente. Después, de esos guitarristas que tocan con los ojos cerrados tenemos varios. Aunque hay que elegirlos bien, porque alguno se apunta para echarse una siesta, y eso no es plan. De lo que mejor estamos es de bailaoras, incluso tenemos algunas con estilo más académico y depurado que la propia Isabel Pantoja.
En fin, creo que podríamos dar la talla. Si eso os lo pensáis y… qué no os gusta? Vale os ofrecemos una procesión, que en la Feria de Abril hay muchas. De lo que peor andamos es de vírgenes, algo que es fácil de entender, dada nuestra media de edad. Aquí igual necesitaríamos colaboración. Tampoco estamos muy sobrados de curas, pero entre el hijo del sacristán y el hombre comodín nos apañamos, aunque igual el tipo de Vicente es más propio para un obispo o cardenal, que para un cura de Sevilla. La ventaja es que como canta las sevillanas en latín riman mucho mejor y además son más largas.
También se me ha ocurrido que yo os podía echar una mano de calesero, para trasladar a los turistas por las calles del pueblo. Me las conozco todas. Sé perfectamente el sentido de la circulación, las direcciones prohibidas, las preferencias en las rotondas, e incluso el ritmo de los semáforos. Eso sí, vosotros tenéis que poner el caballo, el carro, el botijo y el bocadillo. Y yo, sentado como debe ser, a trabajar. También me puedo llevar a mi primo El baraka para que saque fotos a los turistas en los lugares más emblemáticos del pueblo. En este caso nos harán falta dos botijos y por lo menos cinco bocadillo, dada la afición del primito a hincar el diente.
Y ya por último, y haciendo un esfuerzo supremo, me ofrezco a hacer el servicio de “ gorrilla”. Me ponéis una sombrilla, una tumbona y un bocadillo con botijo en la entrada de las eras y yo les indico a los coches el lugar en el que deben aparcar. Que quede claro, yo les indico el aparcamiento. Para ir andando hasta allí a pleno sol, con más de cuarenta grados, me llevaré a mi primo el Baraka. Esos sí, entonces nos podemos apañar con una sola sombrilla y una sola silla, (él ya se queda de pie con un sombrero d epaja), pero nos harán falta tres botijos y siete bocadillos. Y es que la caló es mú mala y da mussa jambre.
De momento es todo lo que os puedo ofrecer. Si alguien de la comisión cree que podemos hacer otras cosas más prácticas y más necesarias, que no dude en decírmelo, con toda la confianza. Vamos como si fuera de mi propia familia. Que me lo diga, que yo no tardo nada en encontrar a alguien dispuesto a echar una mano. Incluso si tener que darle botijo y bocadillo. Que hay muy buena gente, dispuesta siempre a ayudar. Seguro. No quiero la más mínima preocupación. Estoy a vuestra absoluta disposición, y mi primo también, (luego le llamo y se lo digo).
Que os vaya todo muy bien. (esta última línea es seria y gratis, sin bocadillo ni botijo). Espero una respuesta. Se despide este que os quiere………
He esperado unos días en contestar. Para que fuera calando el mensaje y la gente se diera por aludida. Pero bueno no me importa ser el primero en este foro.
Que sepáis que me tenéis a vuestra absoluta disposición, para lo que sea, para lo que haga falta, en cualquier momento, a cualquier hora y a cualquier precio. Pero antes de que os hagáis unas expectativas demasiado amplias, os debo de hacer una serie de aclaraciones. Seguro que en la comisión hay más de uno que no me conoce de nada, otros que me conocen pocotirandoacasiná, otros que me ven de vez en cuando por el pueblo, y alguno que otro que sí que sabe algo más de mí o de mi vida, aunque sea de lejos. Sea de una u otra forma, y para frenar esa ilusión de haber encontrado un fiel colaborador, os tengo que decir, en primer lugar que si hubiera un campeonato del mundo de vagos tendría serias posibilidades de conseguir una medalla. A mí no me incentivan ni los retos profesionales, ni mucho menos los esfuerzos físicos innecesarios… bueno los necesarios tampoco. Yo soy de esas personas que con un botijo y un trozo de pan, me puedo pegar todo el verano sentado a la sombra, mirando al horizonte y sin aburrirme un segundo. Se me da mucho mejor la idea bohemia de la vida, el trazar planes, el pensar en proyectos, en buscar a la persona adecuada para llevarlos a cabo,…( siempre que no sea yo claro). Por eso antes de que haya malos entendidos y penséis en mi como un peón de brega para el trabajo de las fiestas, ya os adelanto que no, que eso no.
Ahora bien, me ofrezco como promotor de un cuadro flamenco para alegraros la sobremesa del vermut. Ahí mis amigos y yo tenemos ya ciertas tablas, un prestigio ganado a pulso y un caché de lo más asequible. Si alguien tiene dudas que se vea el concierto de año nuevo del año pasado. Tiene como tres millones de likes en todas las redes sociales, y nos han ofrecido seis veces grabar un disco. Después de darle muchas vueltas, y estudiar los pros y los contras, he decidido que yo tocaré el cajón. Es un ritmo fácil, casi sin aprendizaje y consiste básicamente en golpear con las manos un trozo de madera. Y lo mejor de todo, he visto muchos vídeos, y en todos el que toca el cajón lo hace… sentado. Eso se adapta perfectamente a mi alergia al esfuerzo. Para tocar las palmas y taconear de pie, os ofrezco a mi primo El Baraka. Aunque ha nacido en Barakaldo, por sus venas corre sangre flamenca, es puro nervio y tiene el ritmo en su adn. Además lleva varios años viendo la feria de abril en la ETB1. Aunque cantan en vasco el Baraka lo entiende perfectamente. Después, de esos guitarristas que tocan con los ojos cerrados tenemos varios. Aunque hay que elegirlos bien, porque alguno se apunta para echarse una siesta, y eso no es plan. De lo que mejor estamos es de bailaoras, incluso tenemos algunas con estilo más académico y depurado que la propia Isabel Pantoja.
En fin, creo que podríamos dar la talla. Si eso os lo pensáis y… qué no os gusta? Vale os ofrecemos una procesión, que en la Feria de Abril hay muchas. De lo que peor andamos es de vírgenes, algo que es fácil de entender, dada nuestra media de edad. Aquí igual necesitaríamos colaboración. Tampoco estamos muy sobrados de curas, pero entre el hijo del sacristán y el hombre comodín nos apañamos, aunque igual el tipo de Vicente es más propio para un obispo o cardenal, que para un cura de Sevilla. La ventaja es que como canta las sevillanas en latín riman mucho mejor y además son más largas.
También se me ha ocurrido que yo os podía echar una mano de calesero, para trasladar a los turistas por las calles del pueblo. Me las conozco todas. Sé perfectamente el sentido de la circulación, las direcciones prohibidas, las preferencias en las rotondas, e incluso el ritmo de los semáforos. Eso sí, vosotros tenéis que poner el caballo, el carro, el botijo y el bocadillo. Y yo, sentado como debe ser, a trabajar. También me puedo llevar a mi primo El baraka para que saque fotos a los turistas en los lugares más emblemáticos del pueblo. En este caso nos harán falta dos botijos y por lo menos cinco bocadillo, dada la afición del primito a hincar el diente.
Y ya por último, y haciendo un esfuerzo supremo, me ofrezco a hacer el servicio de “ gorrilla”. Me ponéis una sombrilla, una tumbona y un bocadillo con botijo en la entrada de las eras y yo les indico a los coches el lugar en el que deben aparcar. Que quede claro, yo les indico el aparcamiento. Para ir andando hasta allí a pleno sol, con más de cuarenta grados, me llevaré a mi primo el Baraka. Esos sí, entonces nos podemos apañar con una sola sombrilla y una sola silla, (él ya se queda de pie con un sombrero d epaja), pero nos harán falta tres botijos y siete bocadillos. Y es que la caló es mú mala y da mussa jambre.
De momento es todo lo que os puedo ofrecer. Si alguien de la comisión cree que podemos hacer otras cosas más prácticas y más necesarias, que no dude en decírmelo, con toda la confianza. Vamos como si fuera de mi propia familia. Que me lo diga, que yo no tardo nada en encontrar a alguien dispuesto a echar una mano. Incluso si tener que darle botijo y bocadillo. Que hay muy buena gente, dispuesta siempre a ayudar. Seguro. No quiero la más mínima preocupación. Estoy a vuestra absoluta disposición, y mi primo también, (luego le llamo y se lo digo).
Que os vaya todo muy bien. (esta última línea es seria y gratis, sin bocadillo ni botijo). Espero una respuesta. Se despide este que os quiere………