Hola qué tal? Cómo os va la vida? espero que bien porque durante estos días he tenido contacto telefónico con algunos de los visitantes de esta página y me han dicho que se encuentran bien, que están un poco aburrido y que los días se les hacen muy largos. Es lo que hay. Pero yo también me he dado cuenta que esta situación nos está haciendo cambiar. Ya es difícil pensar en el futuro, aunque sea a corto plazo, porque centramos toda nuestra atención en el presente y como mucho en mañana o pasado y no mucho más allá. Cualquier cosa que esté un poco más lejana nos parece inalcanzable. Nos resulta casi imposible pensar que pronto llegará el Santo, y un poco después el verano con ese mágico mes de agosto. Nos parece tan lejano que es inabordable. Estamos seguros que van a pasar tantas cosas antes que no nos queda un hueco para imaginar. Por eso nos recluimos en los recuerdos, en lo que fue 2019 para recrear cierto bienestar interior que no nos obligue a caer en la desesperación de lo que va a suceder en este año. Pero esta situación a veces también produce cierta tranquilidad porque jo tenemos que ocupar nuestra mente en nada que vaya más allá de la subsistencia diaria. Cuando salgamos de esto seguro que todos habremos cambiado de una forma o de otra. Pero seguro que será un cambio a mejor.