En términos de psicología, testaferro es aquella persona que según las circunstancias adopta o cambia su papel o personalidad por la de otras personas según su propia conveniencia, también es el término usado cuando se trata de encubrir una situación o conducta inaceptable disfrazándola con una postura diferente.
En términos sociales, la palabra testaferro sirve para señalar de modo peyorativo a aquellas personas que se prestan como títeres de otras siendo manipuladas para que sean ellas las que sean la cara visible y reciban las consecuencias de sus acciones en vez de quien las genera realmente
En términos sociales, la palabra testaferro sirve para señalar de modo peyorativo a aquellas personas que se prestan como títeres de otras siendo manipuladas para que sean ellas las que sean la cara visible y reciban las consecuencias de sus acciones en vez de quien las genera realmente
Vivimos tiempos de vacío, días de mucha presencia interior y de escasa significación externa. Son tiempos difíciles de los que los “iluminati”! dicen que vamos a salir más fuertes cuando la verdad es que no hemos abandonado la fragilidad del ser humano. Y esto es algo que desde hace un tiempo se nota en esta página. Son señales débiles y aisladas, pero si las juntas todas y las estudias en bloque sacas algunas conclusiones esclarecedoras. En unos tiempos en los que necesitamos más que nunca desembarazarnos de la soledad nos embarcamos en mundos aislados. Desde aquellos días de fulgor literario y de críticas, ciertas o no, escondidas detrás de un anonimato pueril, hemos entrado en una fase de desencanto e incluso de desprecio a lo que se escriba en estos lares. Mi primo Baraka no se ha dado cuenta porque él es bueno por naturaleza y no se preocupa de estas debilidades tan mundanas. Pero yo que soy más visceral si me fijo en estas cosas. Por ejemplo, no es nada habitual que cuando alguien escribe algo o cuelga alguna foto, otro alguien se dedique a dar a “ no me gusta” cada vez que alguien le da a “ me gusta”. Puede parecer una tontería, pero es un claro reflejo de la vuelta de ese mar de fondo que de cuando en cuando invade esta página, y que suele coincidir siempre después de alguna tormenta que ha sacudido los cimientos del pueblo. Es una actitud tan anónima como insignificante, pero ilustradora de algunos espíritus que nos acompañan. Algo más importante son los controles que hay que superar para que se publique lo que escribes. Mira, esto me parece bien, porque más que una forma de censura es un intento de que se mantenga un respeto que a veces se pierde y con él se pierden todas las razones que se puedan tener. Con lo bonito que es hablar de la recolección de hongos, de las excursiones de verano o de la victoria del Numancia. Y también es encomiable valorar lo que hacen los demás, o todo lo contrario. Pero siempre que se haga con sinceridad y con respeto. Pero, bueno, son tiempos convulsos y, ya se sabe, días de mucha presencia interior y escaso entusiasmo por el prójimo, aunque ese prójimo sea casi tu compañero de cuna.