DEZA (Soria)

Creo que ya sabréis a estas horas que la Catalina del tio Andresillo nos ha dejado para siempre. De nuevo nuestro campanillo ha despertado para anunciar otra pérdida irreparable. Que descanse en la paz del Señor.

A este campanillo le duelen todos los huesos ya. Hace muchos años que no se voltea y como tampoco se va a reparar nunca jamás, llegará el día no muy lejano que se caiga de su asentamiento. Será una lástima puesto que tiene un tono impresionante; pero lo mismo pasó con la campana de San Juan y nadie ha hecho nada en su favor. Claro que sin el campanillo, cuando nos vayamos muriendo ya no se podrá avisar, del modo habitual, a los dezanos, que abandonamos este "barrio". Buenos días Deza.

Otra vez tenemos el dolor encima. Se ha ido a la casa del Padre nuestra buena amiga Mercedes. Es una persona buena y cariñosa que no podremos olvidar facilmente pues llenó muchas horas de nuestra vida, en Fiestas, con sus jotas tan dulces y tan melodiosas. De mi parte, particularmente, admiro de corazón, la paciencia, el cariño y el buen comportamiento de su esposo Tino, durante su larga enfermadad. El Señor se lo compensará. Mi condolencia a toda su familia y amigos. Vicente.

Ayer me enteré al encontrar unos parientes que había muerto Rafaela, la hermana de la Margarita, de las "Concesas" que estaban en Soria en una residencia. Esta campanillo le habrá dado, sin duda alguna, el último adiós. Que no tenga que tocar mucho por estas cosas pues Deza se va quedando sin sus gentes pues de los que nacimos allí, poco a poco se nos van llevando a donde nadie vuelve y como ya nadie nace en el pueblo...Un saludo Deza.

Era normal que cuando se bandeaba la campana grande que es la Santa María, se hiciera lo mismo con el campanillo. En tiempos iba suave pues se engrasabn los ejes de rotación con aceite y si no había, se echaba la orina que se recogía en un bote que siempre había por el campanario. Esto lo he visto hacer yo muchas veces cuando faltaba el aceite de engrase. No es que fuera correcto; pero se notaba que las campanas giraban mejor que resecas del todo. Ya sabéis que los ejes de las campanas se apoyan, ... (ver texto completo)

La menor de las tres campanas que teníamos en Deza se le llama el campanillo. El campanillo es de naturaleza muy pesada ya que el grueso del bronce es considerable, lo que le da un tono precioso. El yugo y la cabeza hacen juego con el conjunto y resulta muy armónico. Es el complemento ideal de la campana Santa María y las dos en cojunto resultan mucho más melódicas en sus toques festivos y mucho más tristes en su toque de difuntos. Sus cortos brazos no llenan el nicho por lo se hicieron una pared ... (ver texto completo)