Hace unas fechas, la señora Esperanza Aguirre, a la sazón que es quien preside la Comunidad de Madrid, decía que era indecente subir el sueldo a los funcionarios con la que está cayendo. (Las palabras textuales hacían referencia a la deflación o recesión económica que estamos padeciendo.) Ha tenido cumplida respuesta por dos ciudadanos (un hombre y una mujer) que en los medios le han replicado, sin ocultarse, indicando sus nombres y apellidos y los números de sus documentos de identidad. La respuesta,
... (ver texto completo)
Hablando de independencia, hace ya mucho tiempo que dejé de quedarme hasta muy tarde viendo en la tele un programa que se llama -o llamaba- "59 segundos". Y no porque potencialmente no pudiesen tener interés los temas allí tratados, sino por la actitud de los periodistas o contertulios invitados, y no sé si generosamente retribuidos por largar durante un rato. Es el programa ése en el que le bajan el micrófono al que se enrolla y se pasa de esos 59". Y es que, de antemano, ya sabía lo que iban a responder unos y otros, salvando alguna honrosa excepción. Más que analistas, como se dice ahora de forma un tanto pedante, se mueven como forofos futboleros: los unos, defendiendo lo que diga o haga el gobierno, aunque sea indefendible; los otros, atacando todo lo que hace sólo unos segundos defendían los otros. Y lo mismo respecto de la oposición. Los dos bandos, las dos Españas, que decía Machado. Y se llaman periodistas. Nunca, durante el tiempo que estuve de la tele viendo el referido programa, hubo quien hiciese concesiones a "la parte contraria". Y aún les llaman analistas. Es como si fueras al médico y te dijese: usted, colesterol, y las transaminasas altas, y la hemoglobina... Pero doctor, hágame una analítica. -Nada, nada, lo que yo diga va a misa. Amén.
(Para ese viaje, no hacen falta alforjas.) Pues eso mismo digo yo, y me voy a la cama... o me doy una vuelta por este interesante foro.
... (ver texto completo)