La
Carretera de
La Alameda se empezó a construir en pleno
invierno. Como yo de chico cundía mucho, quiero decir que estaba en todas partes, pues ayudé al tío Domingo "el Torrijano" a tirar, juntamente con su hijo Pascual, la pared que le habían expropiado, de su
huerta. Tuvo que recularla un par de metros y poco a poco vimos como Las Callejas, hasta ahora estrechas, dejaban paso a una amplia avenida que es la que se muestra en la
fotografía y que cambió su nombre por el de Carretera de La Alameda. Recuerdos lejanos...
Un abrazo
Deza.