Lo extraordinario en nuestro caso es que en el interior de esta bodega que parece insignificante, haya espacio para cubas grandes. Pues si: Bajando unos metros nos encontramos con una piedra, que denominamos toba y que hace de techo. Debajo de esta toba se puede excavar tanto como se quiera pues cuesta relativamente poco extraer la tierra y agrandar el espacio. En los tiempos en que las hicieron, pues hay muchas, no había televisión, ni siquiera habían inventado la radio y como no había otra distracción... Es lógico que te hagas esas preguntas acerca de la existencia de esas bodegas y del gran tamaño de las cubas. Hubo un tiempo, que todavía recordamos los que pasamos de los cincuenta, en que los llanos del Palancar, del Caminegro, del Pedroso y de otros muchos parajes, estaban dedicados casi en su totalidad al cultivo de la vid, y la producción de vino en Deza era muy importante. Llegó la terrible plaga de la filoxera que hizo que desaparecieran casi todas las viñas de Europa. La solución a dicha... Buenos días Deza. No sabía yo que las bodegas de tu pueblo fuesen tan grandes. Pero si en ese pueblo, en mis frecuentes visitas, no he visto ni siquiera una viña. ¿De dónde sacaban el vino para llenar esas grandes cubas, que según nos cuentas eran tan enormes...? Además si eran tan grandes ¿Cömo pudieron meterlas por una puerta tan pequeña, si apenas puede pasar una persona un poco alta? Espero tu respuesta a unas pregunta tan elementales y tan ignorantes como las mías. Hay que aclarar que yo no... parece que se trata de la bodega del tio Gabino en el Cabezelo. Había unas cubas tan tremendas- las he visto yo- que cuentan que entraban varios amigos a jugar a las cartas. Al final de la callelas eras, hacia el suso, a la derecha se sube a los miradores