Hay una leyenda que va pasando de padres a hijos en el sentido de que en Deza hubo una campana de cien quintales que se llamaba María de Deza y en la constaba la siguiente inscripción: María de Deza soy, la que cien quintales peso, el que no quiera creer, que suba y me coja en peso. Y que se la llevaron los moros a Moros o que se la llevaron los moros, simplemente. De ser cierto habría que pensar que fue en alguna razzia de aquellos tiempos como cuando Almanzor se llevó las campanas de Santiago de... Esta mañana he descubierto que utilizo palabras que no vienen en el diccionario, una de ellas la empleo cuando os digo que el día de San Roque se voltea la campana de la iglesia de Deza, es emocionante. Como no limpiemos las escaleras corremos el riesgo de descalabrarnos porque están tomadas por las palomas.
Recuerdo que cuando había una tarea que era del interés de todos y no había dinero para pagar a un operario que lo hiciera o resultaba mas económico hacerlo uno mismo, se llamaba a “zofra”... Veo que dice, seguramente un dezano, que ésta gran señora lleva ya un siglo sin pisar la peluquería. Mi mujer va cada semana y al otro día parece una gallina "matá" a escobazos. A mi me gustaría saber quien la peinó tan bien y tan económicamente pues por mucho que costara, te saldría barato pues además de tiempo que le ha dirado es el que le durará. FelicesFiestas de Navidad. María de Deza soy/ la que cien quintales peso/ el que no quiera creerme/ que venga y me tome en peso. ¡ Vaya señorona que tenemos en Deza ! Lleva ya un siglo, asi de bien peinada y ni los vientos, ni las lluvias, ni las tempesades, ni los rayos han podido desdibujar esa cabeza de reina que tiene nuestra campanaSanta María. Tiene por ahí, sin duda un enamorado, que ha sabido dedicarle unos versos preciosos que dicen algo así: La Santa María/tañendo y tocando/ sus sayas mostrando...Un abrazo.
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