Hace muchos años la banda de música que llevaba su uniforme reglamentario es la que tocaba en todos los actos programados de las Fiestas. Ya llegaban el día de la vispera y tocaba por la tarde en el coro de la iglesia, en el último día de la novena, al Cristo del Consuelo. Al otro día que era la Cruz amenizaba la Misa Mayor y después tocaba en la Plaza en los bailes públicos, tarde y noche. El día de los toros iba a la plaza y era la que amenizaba aquellos pasodobles tan hermosos que hasta los bailaban el toro y el torero, al compás. Hoy en día todo es dferente: para los bailes una orquesta por todo lo alto, para los pasacalles y toros otra y para la Misa... Ninguna. Si tenemos organista tocará el órgano tan hermoso que tenemos y si no hay organista, tenemos un coro de voces tan celestiales que parece que cantan los ángeles. Te has pasado abuelo; déjame que lo diga. Un abrazo.