En la ermita de San Roque en Deza, existe un cobertizo adosado, para resguardarse, que se llama "portegao". Algunas veces ha sido muy útil. Yo cuando era chico iba a acarrear en verano y me han pillado varias tormentas por el camino, con las mulas cargadas de miés. Si estabas cerca de la ermita arreabas a buen paso para protegerte allí. Lo malo era que a veces nos encontrábamos varios y todos queríamos meternos dentro. A veces las mulas se liaban a coces si se notaban carcanas y extrañas una de otra y la armaban gorda. Esto me ha pasado no una sino varias veces. Además creo que era un peligro pues una edificación asi, en lo alto y con animales atrae a los rayos y pueden pasar desgracias gordas. Claro que si estaba Santa Bárbara en el altar y era la patrona contra las tormentas, pues no debería pasar nada ques lo que acaeció en toda mi vida: No hubo ni el más mínimo incidente en la ermita. Un abrazo...