Luz ahora 0,12106 €/kWh

DEZA: Interior de una bodega abandonada, en Deza. En nuestro...

Interior de una bodega abandonada, en Deza. En nuestro pueblo había muchas bodegas para guardar el vino pues era tierra donde se cogía en cantidad. A partir del año de la filosera que infectó los viñedos a principios del siglo pasado, se arrancaron muchas viñas y ya no se volvieron nunca a plantar. Decayó casi totalmente la actividad vinatera de Deza pues la gente tardó mucho en reaccionar y plantar vid americana, que una vez injertada era practicamente inmune a la filosera, si bién el tiempo de vida de las cepas no era ni la mitad que la de la tierra, de antaño. Al final, como a nadie le gusta la azada se arrancaron todas y ahora no queda ni una para señal. Las bodegas, abandonadas lo mismo que los toneles y tenajas del interior, se muestran como cuevas de Alí-Babá; pero sin tesoros...Un abrazo del abuelo.