Efectivamente: Esta paraje que contemplamos, de Deza, en tiempos fue una nava o laguna de bastante extensión, aunque de poca profundidad. Sólo tiene un escape y es el barranco del peñón, que en su día estaba tapado. Al abrirse paso las aguas, por alguna circunstancia que desconocemos, se vació la nava, quedando como se muestra en la actualidad: una depresión sin agua por tener la salida abierta, como ya se ha dicho. Puedes imaginarte lo bonito que sería este paisaje con una laguna...Saludos.