Es una gallina que se vuelve loca cuando tiene que empollar los huevos para que salvan los polluelos. Eso de volverse loca es un decir pues no es así. Mejor sería que dijéramos que coge unas fiebles que la vuelven "majareta" y con ese fuego que lleva dentro pues hace el milagro de que de un huevo salga esa vida tan bonita que es un polluelo. A todas las aves suele sucederles lo mismo; pero nosotros no nos damos cuenta al no tener el contacto que tenemos con las gallinas. Hoy en día este calorcillo lo procuran con una incuvadora y artificialmente se produce el mismo milagro, siempre y cuando el huevo esté fecundado. Si no estuviera fecundado sale un huevo que se llama, huevo huero y que al romperlo está corrompido y huele muy mal.