DEZA: Pues el tio Juan Sabino trillaba con una burra a coyunta...

Pues el tio Juan Sabino trillaba con una burra a coyunta con el tio Domingo el Torrijano que tenía otra. La parva que echaba era un poco mas grande que la palma de la mano, el trillo tan estrecho que casi no se podía subir uno encima y cuando la aventaba con el viento de la tarde, le quedaba un puñado de trigo. Muchas veces llamaba a mi padre y echaban un cigarro de picadura, juntos, encendiéndolo con su mechero de yesca. En una sóla talega se llevaba lo que había trillado en todo la jornada. No tenía necesidad de cosechadora puesto que en dos minutos le hubiera recogido la cosache y después hubiera estado todo el verano aburriéndose y si saber donde ir y de esta manera se lo pasaba tan a gusto en su era, robada a la arcilla del cerro de la horca y aguantada al camino de San Roque con cuatro pedrusco en los que había plantadas unas higueras que nunca echaros ni un sólo higo ni una sola breva. Un abrazo.