Estas chicas que vemos en la foto, eran prácticamente iguales, iguales. Había mucha gente que no sabia distinguir entre la Flora y la Divina. Yo particularmente las conocía bastante bien pues vivíamos en la misma calle. Además una de ella tenía una cicatriz muy pequeña en la cara, de resultas de algún granito y la delataba. Eran muy vivarachas y corrían como gamos. Que tiempos aquellos...
Un abrazo.
Un abrazo.