¿tienes un restaurante?

DEZA: Eafectivamente Pedro hoy en día en Deza no se castiga...

En ningún momento menciono que en Deza se castigara a los toros a base de palos o de otra manera cruel. Mucho ha llovido desde aquellos años en que algunos espectadores se proveían de garrochas y les pinchaban desde la barrera. Además en la instantánea se ve a Celestino rodando por el suelo, mientras los dos compañeros huyen; no se ve maltrato para el toro; quizás lo estén pasando peor los paisanos perseguidos.
Ahora todo se hace legal: presidente con reglamento, trajes de luces y toreros más o menos expertos provenientes de una escuela taurina, ambulancias, veterinarios, guardia civil, etc. Es el mayor espectáculo de las fiestas de muchos pueblos aunque, según se está poniendo de precio y de requisitos, muchos de ellos tendrán que plantearse prescindir de este plástico acontecimiento.
Yo no estoy a favor ni en contra de esa fiesta, que cada uno es libre de opinar a su gusto pero, aunque me gusta el colorido del paseillo, hace muchos años que no asisto a una corrida.
Un saludo

Eafectivamente Pedro hoy en día en Deza no se castiga para nada a los toros, muy al contrario son ellos los que castigan a la gente si alguno tiene la mala suerte de caer en sus dominios. Tienes razón en que suponen un gasto ingente para los ayuntamientos de pueblos pequeños, sobre todo porque una gran parte de ese gasto se va en seguros, permisos, visados, certificaciones, etc. Y yo digo que si en España los toros forman parte de nuestros acerbo cultural, bien podía en estos casos de ayuntamientos pequeños y en este tipo de espectáculos sin ánimo de lucro, hacerse cargo y cubrir estas contingencias el Mº de Cultura, puesto que de cultura se trata, y que en otros casos de muy complicada explicación, si que subvenciona.
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Buenos días Deza. Me he levantado hace un momento y acabo de entrar en el foro. Me ha chocado que digas que a los toros no se les maltrata en el ruedo: A los toros no se les da una ración de alfalfe, que les gusta; sino una paliza de correr, de engaños, de banderillas que se clavan en sus lomos (sin contar los puyazos en otras plazas) humillaciones, sed, desasosiego, polvo, gritos, silbidos y al final, como poco una estocada, en el mejor de los casos, que le hace caminar sin rumbo buscando un apoyo, ... (ver texto completo)