No ha podido empezar mejor este foro, hoy 31 de enero de 2009, último día del mes -por cierto festividad de San Juan Bosco, pedagogo y educador de los jóvenes-, con la reflexión y el poema al maestro de dos anónimos comunicantes. (Por cierto, ¿no sería mejor que firmaseis con un pseudónimo?) Y cuando se dice maestro, cualquier ciudadano con un mínimo sentido común entiende que se utiliza el genérico y por lo tanto también se refiere a las maestras; el equívoco sólo podría venir de la mente susceptible de algunas "miembras" que, por cierto, flaco favor le están haciendo al feminismo serio en particular, que también existe, como Teruel, y a las demás mujeres en general. Tras esta larga disquisición paso a reproducir un poema dedicado a
LA MAESTRA.
Es en la escuela otra madre
que orienta con sus consejos;
es experta sembradora
de nobles conocimientos;
es mano suave que guía
y es luz que alumbra senderos.
Es, en suma, la maestra,
manojo cálido y tierno
de bondadosa paciencia
y de maternal afecto.
Autor: Publio A. Cordero.
LA MAESTRA.
Es en la escuela otra madre
que orienta con sus consejos;
es experta sembradora
de nobles conocimientos;
es mano suave que guía
y es luz que alumbra senderos.
Es, en suma, la maestra,
manojo cálido y tierno
de bondadosa paciencia
y de maternal afecto.
Autor: Publio A. Cordero.