En los sueños normales, libres de pesadillas, el cuerpo y el espíritu se liberan de las trabas que la llamada vida real impone.
En el amor de pareja, independientemente de la edad, el comportamiento es el propio de los niños.
Es muy fácil reprobar la conducta de nuestros semejantes, sin considerar las motivaciones que tuvieron para ello. Posiblemente en condiciones similares actuaríamos de forma parecida a como lo hicieron ellos.
En el amor de pareja, independientemente de la edad, el comportamiento es el propio de los niños.
Es muy fácil reprobar la conducta de nuestros semejantes, sin considerar las motivaciones que tuvieron para ello. Posiblemente en condiciones similares actuaríamos de forma parecida a como lo hicieron ellos.