El oso y la zorra.
Se jactaba un oso de amar a los hombres por la razón de que no le gustaban los cadáveres. La zorra le replicó:
- ¡Quisieran los dioses que destrozaras a los muertos y no a los vivos.
Un abrazo.
Se jactaba un oso de amar a los hombres por la razón de que no le gustaban los cadáveres. La zorra le replicó:
- ¡Quisieran los dioses que destrozaras a los muertos y no a los vivos.
Un abrazo.