El jabalí es muy parecido al cerdo doméstico, tal como ya hemos dicho. Su cabeza es alargada y más o menos cónica, y termina en una especie de callo plano que le sirve para ozar en el terreno. Los ojos son sumamente pequeños y densamente negros. El cuerpo es macizo y robusto, con las patas bastante cortas pero muy fuertes. Las traseras son ligeramente más bajas que las delanteras. La cola es corta. El pie está provisto de dos dedos con pezuña, así como de dos rudimentos traseros más elevados. Sus huella es muy característica.
Un abrazo.
Un abrazo.