No me gusta la extrema derecha, tampoco la extrema izquierda. Podría estar cómodo en la derecha o la izquierda moderada. Me gustaría más el centro extremo; pero no sabría decir donde estoy situado.
Tanto en las democracias como en las dictaduras, se pueden hacer cosas buenas y malas; pero ni en el mejor de los casos, nadie puede arrogarse la voluntad de un pueblo.
Quien en el debate dialéctico recurre a la descalificación o al insulto, nos está demostrando que le faltan argumentos.
Un abrazo, amigos de Deza
Tanto en las democracias como en las dictaduras, se pueden hacer cosas buenas y malas; pero ni en el mejor de los casos, nadie puede arrogarse la voluntad de un pueblo.
Quien en el debate dialéctico recurre a la descalificación o al insulto, nos está demostrando que le faltan argumentos.
Un abrazo, amigos de Deza