Buenos días Deza y amigos del foro: Creo que a los que hacen mapas los llaman topógrafos y eso viene del griego, idioma del cual tengo algún conocimiento ya que lo tuve de asignatura durante tres años por lo menos: (De topos, "lugar" y grafos, "descripción"). Hasta aquí creo que todos estamos de acuerdo. Mi pregunta viene ahora y la hago por estar un poco despistado. ¿Cómo se llamarán o que nombre tendrán los que hagan los mapas de la ministra Aido, esa de la igualdad, que se quiere gastar 24.000 €uros del “boyante” erario público, en hacernos unas cartografías en donde veamos (el que quiera mirarlas) los sitios o lugares en donde la mujer se masajee el clítoris y los labios menores con más asiduidad o necesidad de hacerlo. ¿Será para montar una industria turística yendo a esos lugares destacados, ayudando de esta manera a salir de la crisis actual o será para alimentar la libido de los masoquistos/as del género o génera y ganar votos y a la vez justificar su gran sueldo sin hacer nada de provecho y encima cachondeándose de tantos...? ¿”Hasta cuando, ¡Oh Catilina!, estarás abusando de nuestra paciencia”...?
Un abrazo.
Un abrazo.
Quousque tandem, Catilina…. ¡qué razón tienes abuelo, yo solo estudié un año de griego, pero la respuesta a tu pregunta bien podría ser “**ñ*grafía”. El prefijo es mocosuena mocosuenae, pero el sufijo es el mismo. La señora ministro/a AIDO muy lejos, pero ya nada nos sorprende; supongo que, para confeccionar ese mapa, se prestará de modelo ella misma. Claro, que los extremeños reciben clases de masturbación…y todo con nuestro dinero, como bien dices. Cierto es aquel vaticinio del político que dijo que cuando dejaran el gobierno a España no la iba a conocer ni la madre que la parió. Es el hermano del hermano que colocó en el chiringuito del Gobierno de Andalucía y que, para salir de un embotellamiento en la frontera de Portugal, llamó a un Mystere, claro que su jefe asistió a un mitín en Sevilla en un Falcom. Muy oportuna la cita a la primera catilinaria de Cicerón, lo peor es que todas esas veleidades, como digo, las pagamos con nuestro dinero.
Un abrazo
Un abrazo