Lo mas corriente al escardar, era cortar los cardos por la base y dejarlos aplanados en el suelo. Se repasaba toda la pieza y algunas veces aparecían en grandes ronchas que consumían incluso los sembrados, sobre todo en años de sequía.
Un abrazo.
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El encontrar cardos, en la siega era el mayor enemigo del segador puesto que no hay persona que aguante sus pinchazos, aparte de que las pinchas se enconan y dan mal estar. Había por tanto que repasar todo el término y ello suponía mucha mano de obra, incluso empleando a menores pues todos éramos necesarios.
Un abrazo.
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Entre los cardos mas comunes se encuentra el cardo cundidor (Cirsium arderse) que es el de los sembrados y que también crece en los barbechos mal cuidados, siendo una plaga si se dejan que echen simiente pues anegan grandes cantidades de terreno al esparcirse por medio del viento. Suelen aparecer mucho si se labra con el terreno blando. Las ovejas a veces tratan de comérselos pero con efectos deletéreos o sea que son venenosos a partir de cierta cantidad ingerida.
Un abrazo.
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El cardo cundidor es el único cardo que se reproduce a partir de rizomas subterráneos y, cuando la planta está apunto de florecer, es el mejor momento para su eliminación.
Un abrazo.
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