Talamán es un bonito pueblo que pertenece a la provincia de Zaragoza, a las faldas del Moncayo. Es el último pueblo de la Comarca del Campo de Borja, cuyo término es rayano a Soria. Este chascarrillo o realidad, no sé donde lo he leído o escuchado.
Pues bien, un año para la fiesta del pueblo, el alcalde, para deleite de los niños, le pidió al de Tarazona que le prestara un gigante y un par de cabezudos a fin de amenizar la fiesta. El de Tarazona se los cedió de buen grado, y nombraron zofra a los mozos que deberían hacerse cargo de los mismos para recorrer las calles tras la charanga. Y fue un éxito: los niños gritaban mientras correteaban a su alrededor, hasta el punto de que el gigante estaba bloqueado en la plaza sin poder avanzar. Entonces, el mozo que portaba el gigante, para pedir que se apartaran, abrió la trampilla de la celosía donde tienen la mirilla para ver, que está situada en el bajo vientre del gigante, y sacó su robusto brazo haciendo ademanes para que le abrieran camino.
El Agustinico, un niño del pueblo al que le faltaba un hervor, interpretó aquello a su manera, de modo que comenzó a gritar:
“Apartarus, que va a mear el gigante”.
Un saludo.
Pues bien, un año para la fiesta del pueblo, el alcalde, para deleite de los niños, le pidió al de Tarazona que le prestara un gigante y un par de cabezudos a fin de amenizar la fiesta. El de Tarazona se los cedió de buen grado, y nombraron zofra a los mozos que deberían hacerse cargo de los mismos para recorrer las calles tras la charanga. Y fue un éxito: los niños gritaban mientras correteaban a su alrededor, hasta el punto de que el gigante estaba bloqueado en la plaza sin poder avanzar. Entonces, el mozo que portaba el gigante, para pedir que se apartaran, abrió la trampilla de la celosía donde tienen la mirilla para ver, que está situada en el bajo vientre del gigante, y sacó su robusto brazo haciendo ademanes para que le abrieran camino.
El Agustinico, un niño del pueblo al que le faltaba un hervor, interpretó aquello a su manera, de modo que comenzó a gritar:
“Apartarus, que va a mear el gigante”.
Un saludo.