Para aquellos que dicen que este foro tratamos del pasado más que del presente, hoy quiero adelantarme y hablar del futuro. Sabemos que el pasado no existe y el futuro tampoco, pero trataré de hacer un esbozo profético acerca del discurso que nuestro querido presidente del gobierno, pronunciará en la jornada final de la presidencia de la C E el 30 de Junio, fecha de la clausura de su mandato:
Europeos, hoy finaliza felizmente el turno de la presidencia que, ha correspondido a mi país para regir esta Comunidad Europea. Me dirijo a vosotros en inglés, idioma que en España conocen hasta los niños de las guarderías, aunque podría hacerlo en cualquier otro idioma, dada mi condición de políglota y la gran facilidad que poseo para aprender idiomas.
La realidad durante mi mandato ha superado todas las previsiones.
En lo que respecta a España, he conseguido avanzar de los nacionalismos a los feudalismos.
En cuanto a la economía, mi gestión ha resultado óptima y, para aquellos derrotistas y malos españoles, esos fascistas que vaticinaban el fracaso económico, ha constituido una gran decepción.
Muchos han sido los éxitos del gobierno progresista que presido, hemos logrado acabar con el paro, en contra de las previsiones de los pesimistas que profetizaban que llegaríamos a los cinco millones de parados. Los socialistas hemos negado importantes subvenciones a la banca, hemos realizado grandes obras para invertir el dinero que nos sobraba, siempre hemos dicho la verdad a nuestros conciudadanos, hemos incrementados los símbolos ancestrales de nuestra cultura y respetado las banderas de otros países, hemos condenado el aborto, hemos acabado con esa terrible espada de Damocles que es el paro creando trabajo para todos, desechando el miedo de aquellos jóvenes que salen de la universidad, o de quienes temían perderlo.
Los sindicatos han sido unos de los pilares de nuestro progreso; han colaborado en el crecimiento económico, y una prueba de ello es que no han convocado ni una sola huelga general, administrándose con las cuotas de los obreros y sin recibir subvención alguna por parte del gobierno.
Cada día se abren más negocios y son más los capitales extranjeros que se invierten en nuestro país. Hemos luchado contra el fraude de los fascistas, que se encargan trajes a expensas de prevaricaciones, cuando nosotros estamos limpios, inmaculados, en el umbral de la miseria. Basta con verificar la pobreza en que están sumidos los miembros y miembras de mi gobierno.
Los pensionistas están encantados con el incremento de las pensiones y la reducción del irpf.
Como consecuencia de la creación de puestos de trabajo, hemos acabado con el per, con las sgaes, hemos bajado impuestos como el iva y actualizado la pensión de las viudas.
Pero nuestro más importante logro, ha consistido en salvar a la vieja Europa de aquella crisis que fui el primero en reconocer y que, gracias a mis previsiones y mis desvelos, ya se ha superado.
Para no resultar pesado, quiero terminar con uno de mis refranes favoritos: los hechos hablan, las razones sobran.
Un saludo
Europeos, hoy finaliza felizmente el turno de la presidencia que, ha correspondido a mi país para regir esta Comunidad Europea. Me dirijo a vosotros en inglés, idioma que en España conocen hasta los niños de las guarderías, aunque podría hacerlo en cualquier otro idioma, dada mi condición de políglota y la gran facilidad que poseo para aprender idiomas.
La realidad durante mi mandato ha superado todas las previsiones.
En lo que respecta a España, he conseguido avanzar de los nacionalismos a los feudalismos.
En cuanto a la economía, mi gestión ha resultado óptima y, para aquellos derrotistas y malos españoles, esos fascistas que vaticinaban el fracaso económico, ha constituido una gran decepción.
Muchos han sido los éxitos del gobierno progresista que presido, hemos logrado acabar con el paro, en contra de las previsiones de los pesimistas que profetizaban que llegaríamos a los cinco millones de parados. Los socialistas hemos negado importantes subvenciones a la banca, hemos realizado grandes obras para invertir el dinero que nos sobraba, siempre hemos dicho la verdad a nuestros conciudadanos, hemos incrementados los símbolos ancestrales de nuestra cultura y respetado las banderas de otros países, hemos condenado el aborto, hemos acabado con esa terrible espada de Damocles que es el paro creando trabajo para todos, desechando el miedo de aquellos jóvenes que salen de la universidad, o de quienes temían perderlo.
Los sindicatos han sido unos de los pilares de nuestro progreso; han colaborado en el crecimiento económico, y una prueba de ello es que no han convocado ni una sola huelga general, administrándose con las cuotas de los obreros y sin recibir subvención alguna por parte del gobierno.
Cada día se abren más negocios y son más los capitales extranjeros que se invierten en nuestro país. Hemos luchado contra el fraude de los fascistas, que se encargan trajes a expensas de prevaricaciones, cuando nosotros estamos limpios, inmaculados, en el umbral de la miseria. Basta con verificar la pobreza en que están sumidos los miembros y miembras de mi gobierno.
Los pensionistas están encantados con el incremento de las pensiones y la reducción del irpf.
Como consecuencia de la creación de puestos de trabajo, hemos acabado con el per, con las sgaes, hemos bajado impuestos como el iva y actualizado la pensión de las viudas.
Pero nuestro más importante logro, ha consistido en salvar a la vieja Europa de aquella crisis que fui el primero en reconocer y que, gracias a mis previsiones y mis desvelos, ya se ha superado.
Para no resultar pesado, quiero terminar con uno de mis refranes favoritos: los hechos hablan, las razones sobran.
Un saludo
Pues yo opino, Dezano, que has olvidado otros muchos logros del Presidente. No mencionas el tema de la Educación desde las escuelas a la Universidad, ni lo del Informe Pisa gracias a la Ministra de Educación y al de Cultura- qué casualidad, hermano de su amiguete Gabilondo-, ni haces mención al gallinero en que ha convertido a lo más sagrado que es la Justicia, ni a los esfuerzos por borrar los rencores que suscitó aquella guerra que ya nadie recuerda, ni lo de papeles para todos. Pero debemos estarle agradecidos porque, hoy mismo, declara que ya ha acabado la maldita crisis. La enumeración de sus éxitos resultaría interminable.
Saludos.
Saludos.