REFLEXIONES SOBRE LA CRISIS DE LA EUROZONA Y EL AJUSTE PRESUPUESTRIO ESPAÑOL. ¿REFORMA Ó RUPTURA? I
-. Retrospectiva de la CEE para poder explicar la actual crisis de la eurozona
-. La CEE se fundó en 1957 y ha habido en cada década un hito en el proceso de integración económica. En los sesenta, la consecución de la unión aduanera. Del sesenta al noventa sucesivas ampliaciones. En 1992 en virtud del Tratado de Maastricht la orientación hacia la unión monetaria UME y la introducción del euro en 1999.
-. El Tratado de Maastrich contiene una serie de disposiciones fundamentales para asegurar la credibilidad del euro: la independencia del Banco Central Europeo BEC al que asigna velar por la estabilidad de los precios y le prohibe la concesión de créditos a gobiernos para financiar sus déficits públicos. No permite rescatar a países excesivamente endeudados por parte de la UE, ni de los países socios y establece un mecanismo de sanciones en casos de insolidez presupuestaria.
-. El Pacto de Estabilidad y Crecimiento PEC establece que el déficit público tiene un límite del 3% (salvo circunstancias excepcionales) y se fijan las sanciones entre el 0,2% y 0,5% del PIB, en caso de que un país incurra en déficit superior a dicho tope.. La regla de “no bail-out” establece que cada país era responsable de sus deudas. El marco institucional del euro se caracteriza por una política monetaria única y unas políticas fiscales descentralizadas. Desde el momento de la creación del PEC se temía que la política presupuestaria nacional pudiera entrar en conflicto con la política monetaria común.
-. Recordemos que entre las numerosas uniones monetarias que se crearon en el pasado entre regiones con estructuras económicas heterogéneas, sólo funcionaron aquellas que culminaron largos procesos de reunificación política, como EEUU, Suiza, Italia en el siglo XIX y Alemania en dos ocasiones: 1ª-. La unidad económica que se puso en marcha con la Zollverein -la Unión Aduanera- en 1834, provocó la unificación política que se logró, en gran parte por eso, tras la victoria prusiana de 1870, al proclamar Emperador de Alemania a Guillermo I con la constitución como nuevo imperio en 1871, 2ª Tras la reunificación, en 1990 con la caída del Muro de Berlín
-. El propio proceso de integración monetaria en la CEE ha sufrido varios reveses: 1º-En 1970 el Plan Delors como precursor de la UME, fracasó porque Francia se oponía a un traspaso de poderes a niveles supranacionales. 2º -En 1972 se puso en marcha la serpiente monetaria como sustituto de la unión monetaria con tipo de cambio fijo, pero hubo abandonos. 3º- En 1979 entró en vigor el SME, y estuvo a punto de derrumbarse con las tormentas monetarias de 1992 y 1993, ya encarrilado Maastricht.
-. En la negociación del Tratado de Maastrich se hicieron avisos sobre los riesgos que crearía una moneda única, como el fuerte incremento de las desigualdades sociales de los países, que veían que sus precios se unificarían al alza, con la media de la zona euro, a mayor velocidad que sus salarios. Los beneficios de las bajadas de los tipos de interés por adoptar el euro, han hecho olvidar estos problemas, que la crisis actual ha destapado
-. Tal vez sea una ironía de la historia el hecho de que fuera precisamente Alemania la que, a mediados de los años noventa, impusiera a sus socios comunitarios el Pacto de Estabilidad y Crecimiento (PEC) de Maastricht, por temor a que los países meridionales, una vez incorporados a la UME dejaran de considerar la disciplina fiscal como asunto de interés común en la zona euro. Resultó que fue Alemania en 2001 la que tenía muchos deberes pendientes en materia de saneamiento presupuestario. La mayor parte del déficit alemán era estructural y el déficit no provenía principalmente de la Administración Central, sino de los Lander (Estados Federados) y de las corporaciones locales, además de la Seguridad Social, que atiende a la sanidad. El Gobierno Federal no disponía de los mecanismos para imponer la disciplina fiscal necesaria a estos entes. Es más, los Estados Federados se resistieron primeramente a firmar un pacto nacional de estabilidad presupuestaria.
-. En septiembre del año 2002 se flexibilizó el PEC. Los adictos a ideas pasadas de moda se decantan por políticas fiscales expansivas mediante un gasto público y un endeudamiento estatal creciente. En España los gobiernos autonómicos se pronunciaron en este sentido, nada más de conocerse la propuesta del comisario de retrasar el objetivo de déficit cero del 2004 a 2006. La eurozona se fue alejando del objetivo de equilibrio presupuestario que se había alcanzado en el 2000. España y 8 países más, en 2002 tienen sus presupuestos más o menos equilibrados, Luxemburgo y Finlandia con superávit. El verdadero problema lo causan Alemania, Francia, Italia y Portugal, que no habían aprovechado los años de buena coyuntura 1999 y 2000 para la consolidación presupuestaria y parece inalcanzable el equilibrio presupuestario en los dos próximos años. El comisario y el eurogrupo abrieron las puertas para una aplicación discrecional, según el caso de cada país.
-. Noviembre de 2002 fue nefasto para la zona del euro. Alemania y Francia consiguieron imponer en el Eurogrupo y en el Ecofin su criterio de no cumplir con las reglas del PEC y de seguir incurriendo en déficit públicos excesivos, por encima del 3% del PIB. La CE sufrió un serio revés en su capacidad no hacer respetar los criterios de disciplina presupuestaria acordados por el tratado de Amsterdam. Cuatro países, entre ellos España, hicieron aflorar la amarga experiencia de que las reglas de juego no son iguales para todos los miembros de la Unión.
-. Alemania y Francia se recuperan entre 2004 y 2005. Ante estas perspectivas, no hacen falta estímulos fiscales, como los que se trasmiten a través de abultados déficit públicos. Una vez comenzada la fase expansiva del ciclo hacen un esfuerzo para reducir el déficit pedido por CE. La reducción del gasto público tuvo un efecto contractivo sobre la demanda agregada que fue compensado por el impacto positivo en términos de confianza y credibilidad a que da lugar la consolidación presupuestaria.
-. Retrospectiva de la economía española para poder explicar el actual ajuste presupuestario
-. Desde finales de 2008, las inyecciones de liquidez a la banca europea por parte del BCE fueron aprovechadas por las bancos y cajas nacionales para adquirir deuda pública y sacar beneficio del arbitraje de tipos: las entidades pedían dinero a corto al BCE al 1%, e invertían en bonos y deuda pública a una rentabilidad mayor, con lo cual el Gobierno lograba colocar su masiva emisión de deuda y lograba financiación para cubrir su creciente déficit público (del 11,2% del PIB en 2009), restringiendo así el crédito a empresas y familias. Pero la fiesta se acabó cuando el BCE comenzó a cerrar el grifo.
-. Los factores que han determinado la actual crisis española son: la crisis de deuda griega, la creciente restricción de liquidez por parte del BCE, el abultado déficit de España, el récord de emisión de deuda del Tesoro, la ausencia de reformas, el estancamiento económico, la falta de reestructuración financiera, el gran apalancamiento de bancos y cajas con el exterior (tienen que refinanciar cerca de 85.000 millones en 2010, otros tantos en 2011 y unos 100.000 en 2012), la creciente exposición de estas mismas entidades a la deuda española...
-. Todo sumó para acrecentar el rechazo de la deuda pública y privada española por parte de los inversores..-. El Gobierno disparó el gasto público desde inicios de 2009 bajo el argumento de que los "estímulos" permitirían el inicio de la recuperación económica, mientras los ingresos fiscales se desplomaban. Todo ello se materializó en un déficit público histórico y en la consiguiente emisión récord de deuda.
-. La rebaja aplicada por el S&P el pasado 29 de abril hizo saltar las alarmas y encareció la emisión de deuda gubernamental y privada. Esto se reflejó de inmediato en los seguros de impago de deuda (CDS) pública y privada.
-. Retrospectiva de la CEE para poder explicar la actual crisis de la eurozona
-. La CEE se fundó en 1957 y ha habido en cada década un hito en el proceso de integración económica. En los sesenta, la consecución de la unión aduanera. Del sesenta al noventa sucesivas ampliaciones. En 1992 en virtud del Tratado de Maastricht la orientación hacia la unión monetaria UME y la introducción del euro en 1999.
-. El Tratado de Maastrich contiene una serie de disposiciones fundamentales para asegurar la credibilidad del euro: la independencia del Banco Central Europeo BEC al que asigna velar por la estabilidad de los precios y le prohibe la concesión de créditos a gobiernos para financiar sus déficits públicos. No permite rescatar a países excesivamente endeudados por parte de la UE, ni de los países socios y establece un mecanismo de sanciones en casos de insolidez presupuestaria.
-. El Pacto de Estabilidad y Crecimiento PEC establece que el déficit público tiene un límite del 3% (salvo circunstancias excepcionales) y se fijan las sanciones entre el 0,2% y 0,5% del PIB, en caso de que un país incurra en déficit superior a dicho tope.. La regla de “no bail-out” establece que cada país era responsable de sus deudas. El marco institucional del euro se caracteriza por una política monetaria única y unas políticas fiscales descentralizadas. Desde el momento de la creación del PEC se temía que la política presupuestaria nacional pudiera entrar en conflicto con la política monetaria común.
-. Recordemos que entre las numerosas uniones monetarias que se crearon en el pasado entre regiones con estructuras económicas heterogéneas, sólo funcionaron aquellas que culminaron largos procesos de reunificación política, como EEUU, Suiza, Italia en el siglo XIX y Alemania en dos ocasiones: 1ª-. La unidad económica que se puso en marcha con la Zollverein -la Unión Aduanera- en 1834, provocó la unificación política que se logró, en gran parte por eso, tras la victoria prusiana de 1870, al proclamar Emperador de Alemania a Guillermo I con la constitución como nuevo imperio en 1871, 2ª Tras la reunificación, en 1990 con la caída del Muro de Berlín
-. El propio proceso de integración monetaria en la CEE ha sufrido varios reveses: 1º-En 1970 el Plan Delors como precursor de la UME, fracasó porque Francia se oponía a un traspaso de poderes a niveles supranacionales. 2º -En 1972 se puso en marcha la serpiente monetaria como sustituto de la unión monetaria con tipo de cambio fijo, pero hubo abandonos. 3º- En 1979 entró en vigor el SME, y estuvo a punto de derrumbarse con las tormentas monetarias de 1992 y 1993, ya encarrilado Maastricht.
-. En la negociación del Tratado de Maastrich se hicieron avisos sobre los riesgos que crearía una moneda única, como el fuerte incremento de las desigualdades sociales de los países, que veían que sus precios se unificarían al alza, con la media de la zona euro, a mayor velocidad que sus salarios. Los beneficios de las bajadas de los tipos de interés por adoptar el euro, han hecho olvidar estos problemas, que la crisis actual ha destapado
-. Tal vez sea una ironía de la historia el hecho de que fuera precisamente Alemania la que, a mediados de los años noventa, impusiera a sus socios comunitarios el Pacto de Estabilidad y Crecimiento (PEC) de Maastricht, por temor a que los países meridionales, una vez incorporados a la UME dejaran de considerar la disciplina fiscal como asunto de interés común en la zona euro. Resultó que fue Alemania en 2001 la que tenía muchos deberes pendientes en materia de saneamiento presupuestario. La mayor parte del déficit alemán era estructural y el déficit no provenía principalmente de la Administración Central, sino de los Lander (Estados Federados) y de las corporaciones locales, además de la Seguridad Social, que atiende a la sanidad. El Gobierno Federal no disponía de los mecanismos para imponer la disciplina fiscal necesaria a estos entes. Es más, los Estados Federados se resistieron primeramente a firmar un pacto nacional de estabilidad presupuestaria.
-. En septiembre del año 2002 se flexibilizó el PEC. Los adictos a ideas pasadas de moda se decantan por políticas fiscales expansivas mediante un gasto público y un endeudamiento estatal creciente. En España los gobiernos autonómicos se pronunciaron en este sentido, nada más de conocerse la propuesta del comisario de retrasar el objetivo de déficit cero del 2004 a 2006. La eurozona se fue alejando del objetivo de equilibrio presupuestario que se había alcanzado en el 2000. España y 8 países más, en 2002 tienen sus presupuestos más o menos equilibrados, Luxemburgo y Finlandia con superávit. El verdadero problema lo causan Alemania, Francia, Italia y Portugal, que no habían aprovechado los años de buena coyuntura 1999 y 2000 para la consolidación presupuestaria y parece inalcanzable el equilibrio presupuestario en los dos próximos años. El comisario y el eurogrupo abrieron las puertas para una aplicación discrecional, según el caso de cada país.
-. Noviembre de 2002 fue nefasto para la zona del euro. Alemania y Francia consiguieron imponer en el Eurogrupo y en el Ecofin su criterio de no cumplir con las reglas del PEC y de seguir incurriendo en déficit públicos excesivos, por encima del 3% del PIB. La CE sufrió un serio revés en su capacidad no hacer respetar los criterios de disciplina presupuestaria acordados por el tratado de Amsterdam. Cuatro países, entre ellos España, hicieron aflorar la amarga experiencia de que las reglas de juego no son iguales para todos los miembros de la Unión.
-. Alemania y Francia se recuperan entre 2004 y 2005. Ante estas perspectivas, no hacen falta estímulos fiscales, como los que se trasmiten a través de abultados déficit públicos. Una vez comenzada la fase expansiva del ciclo hacen un esfuerzo para reducir el déficit pedido por CE. La reducción del gasto público tuvo un efecto contractivo sobre la demanda agregada que fue compensado por el impacto positivo en términos de confianza y credibilidad a que da lugar la consolidación presupuestaria.
-. Retrospectiva de la economía española para poder explicar el actual ajuste presupuestario
-. Desde finales de 2008, las inyecciones de liquidez a la banca europea por parte del BCE fueron aprovechadas por las bancos y cajas nacionales para adquirir deuda pública y sacar beneficio del arbitraje de tipos: las entidades pedían dinero a corto al BCE al 1%, e invertían en bonos y deuda pública a una rentabilidad mayor, con lo cual el Gobierno lograba colocar su masiva emisión de deuda y lograba financiación para cubrir su creciente déficit público (del 11,2% del PIB en 2009), restringiendo así el crédito a empresas y familias. Pero la fiesta se acabó cuando el BCE comenzó a cerrar el grifo.
-. Los factores que han determinado la actual crisis española son: la crisis de deuda griega, la creciente restricción de liquidez por parte del BCE, el abultado déficit de España, el récord de emisión de deuda del Tesoro, la ausencia de reformas, el estancamiento económico, la falta de reestructuración financiera, el gran apalancamiento de bancos y cajas con el exterior (tienen que refinanciar cerca de 85.000 millones en 2010, otros tantos en 2011 y unos 100.000 en 2012), la creciente exposición de estas mismas entidades a la deuda española...
-. Todo sumó para acrecentar el rechazo de la deuda pública y privada española por parte de los inversores..-. El Gobierno disparó el gasto público desde inicios de 2009 bajo el argumento de que los "estímulos" permitirían el inicio de la recuperación económica, mientras los ingresos fiscales se desplomaban. Todo ello se materializó en un déficit público histórico y en la consiguiente emisión récord de deuda.
-. La rebaja aplicada por el S&P el pasado 29 de abril hizo saltar las alarmas y encareció la emisión de deuda gubernamental y privada. Esto se reflejó de inmediato en los seguros de impago de deuda (CDS) pública y privada.