EL LEGADO DEL MÉDICO HUMANISTA DON GREGORIO MARAÑÓN (1887 – 1960) IX (Continuación)
-. Bibliografía de Pensamiento
Biología y feminismo (1920)
Sexo, trabajo y deporte (1925)
Raíz y decoro de España (1933)
Vocación y ética (1935)
Psicología del gesto (1937)
Crónica y gesto de la libertad (1938)
Elogio y nostalgia de Toledo (1941)
Vida e historia (1941)
Ensayos liberales (1946)
Españoles fuera de España (1947)
El alma de España (1951)
F. Humanismo médico.
-. Este apartado de la exposición se ilustra con la recreación con materiales de época de tres espacios en los que Marañón desarrolló su labor científica: laboratorio, sala de hospital y consulta clínica. Entre otras se recogen el fonendoscopio y oscilómetro que usó el propio Marañón así como su mesa de trabajo en el hospital y numeroso material e instrumental de su Servicio y laboratorio (microscopios, material quirúrgico, carro de curas, etc.), procedentes en su mayor parte del Museo de Sanidad del Instituto de Salud Carlos III de Madrid.
-. Entre las numerosas facetas de su personalidad, nos centraremos en su dimensión como médico humanista. Desde la tradición humanística de los médicos cordobeses del Medievo, Maimónides y Averroes, la medicina en España siempre ha destacado por esa dimensión humanística que la enaltece, y entre sus grandes figuras contemporáneas, sobresale la de Gregorio Marañón.
-. Estudió Medicina en la Facultad madrileña de San Carlos. Ramón y Cajal fue uno de sus maestros. Jovencísimo se convirtió en una eminencia médica. Los tribunales que leyeron sus primeros trabajos clínicos y experimentales no podían creer que hubiesen sido realizados por alguien que aún no había terminado la carrera.
-. En 1908, obtuvo el Premio Extraordinario de Licenciatura y el de doctor en 1910, destacándose como lector voraz, dominaba el inglés, francés y alemán.
-. Viajó a Alemania donde trabajó con Paul Ehrlich, familiarizándose con las líneas de investigación médica más avanzadas del momento.
-. En 1911, elaboró su tesis doctoral, La sangre en los estados tiroideos. Con Teófilo Hernando inició una larga y fecunda colaboración al codirigir el Manual de Medicina Interna (1916).
-. En 1918, viajó a Francia, para estudiar la etiología de la epidemia gripal que asolaba España y elaborar propuestas para combatirla, entablando amistad con científicos europeos como Fleming.
-. Marañón cifró su comportamiento ético y social a través de la medicina. Su visión humanística según la cual no hay enfermedades sino enfermos, caracterizó su labor docente y clínica. Su compromiso con la justicia social, con la investigación y con la medicina como preocupación nacional se plasmaron en facetas de su vida científica.
-. Dice Marañón: “ La enseñanza ha sido mi vocación “. “España no está en deuda con la civilización; sino con un solo sector de la civilización, con el progreso de las ciencias experimentales”.
.-El Dr. Marañón fue pionero de la endocrinología en nuestro país, su otro ámbito de investigación fue la lucha contra las enfermedades infecciosas Su visión humanista de la medicina, caracterizó su labor docente y clínica. La vastísima obra médica de Marañón, traducida a los idiomas más importantes del mundo, se plasmó en 32 monografías y superó el millar de artículos de investigación. Sus descubrimientos sobre las enfermedades infecciosas, sobre las glándulas de secreción interna, la emoción, la diabetes, la obesidad, sus trabajos sobre biología sexual, descripción del síndrome pluriglandular, sus trabajos sobre insuficiencia suprarrenal, la pituitaria, el tiroides. fisiopatología tiroieda, hipofisaria e hipotalámica, su concepto de edad crítica, sus aportaciones acerca del síndrome A-B-D, entre otras, le otorgaron fama mundial.
-. Fue el primero en demostrar las frecuente aparición de hipertrofia muscular en las piernas de los niños con mixedema e inyectó, experimentalmente, adrenalina para conseguir un estado hipermetabólico en casos de disfunción tiroidea.
-. Gran conocedor del hombre, en el campo de la psicología, sus consideraciones sobre procesos psicológicos y psicopatológicos resultaron fundamentales en temas como las edades, los sueños, el resentimiento, el hambre, la timidez, etc. Contribuyó a establecer la relación entre la psicología y la endocrinología, además de ser el único médico español importante que conoció personalmente a Freud y uno de los pocos biólogos que fue considerado seriamente por los primeros psicoanalistas
-. Para Marañón, como para Freud, la libido (a la que Marañón llamaba "hambre sexual") era un impulso primario. Pero para el endocrinólogo esta energía específica era producida, originalmente, por un fenómeno químico: la irrupción en la sangre de las secreciones internas de las gónadas.. A nivel filosófico, pensó que el psicoanálisis y la endocrinología eran tareas complementarias, ya que las dos perseguían establecer la idiosincrasia del individuo, y que la mayor contribución de Freud a la medicina había sido restaurar una perspectiva humanística.
-. Para Marañón, no es posible imaginar un médico sin cultura humanista. Para él la medicina es una filosofía de vida, y el enfermo precisa más que un técnico, alguien que sepa compartir la angustia que le amenaza. Sin llegar al extremo de la célebre sentencia de Letamendi, “El médico que solo medicina sabe, no sabe ni medicina siquiera”, es evidente que la cultura humanista lo acerca más al hombre, al hacerle más comprensivo, generoso y bueno, y también, más eficiente.
-. Frente al médico enciclopédico, mero archivo de conocimientos, Marañón postula el médico integral, técnico y al mismo tiempo humanista, capaz de comprender la complejidad del drama humano, y de asumir con plenitud su gran responsabilidad, sin olvidar las implicaciones sociales y económicas que acompañan siempre al proceso patológico.
-. Bibliografía de Pensamiento
Biología y feminismo (1920)
Sexo, trabajo y deporte (1925)
Raíz y decoro de España (1933)
Vocación y ética (1935)
Psicología del gesto (1937)
Crónica y gesto de la libertad (1938)
Elogio y nostalgia de Toledo (1941)
Vida e historia (1941)
Ensayos liberales (1946)
Españoles fuera de España (1947)
El alma de España (1951)
F. Humanismo médico.
-. Este apartado de la exposición se ilustra con la recreación con materiales de época de tres espacios en los que Marañón desarrolló su labor científica: laboratorio, sala de hospital y consulta clínica. Entre otras se recogen el fonendoscopio y oscilómetro que usó el propio Marañón así como su mesa de trabajo en el hospital y numeroso material e instrumental de su Servicio y laboratorio (microscopios, material quirúrgico, carro de curas, etc.), procedentes en su mayor parte del Museo de Sanidad del Instituto de Salud Carlos III de Madrid.
-. Entre las numerosas facetas de su personalidad, nos centraremos en su dimensión como médico humanista. Desde la tradición humanística de los médicos cordobeses del Medievo, Maimónides y Averroes, la medicina en España siempre ha destacado por esa dimensión humanística que la enaltece, y entre sus grandes figuras contemporáneas, sobresale la de Gregorio Marañón.
-. Estudió Medicina en la Facultad madrileña de San Carlos. Ramón y Cajal fue uno de sus maestros. Jovencísimo se convirtió en una eminencia médica. Los tribunales que leyeron sus primeros trabajos clínicos y experimentales no podían creer que hubiesen sido realizados por alguien que aún no había terminado la carrera.
-. En 1908, obtuvo el Premio Extraordinario de Licenciatura y el de doctor en 1910, destacándose como lector voraz, dominaba el inglés, francés y alemán.
-. Viajó a Alemania donde trabajó con Paul Ehrlich, familiarizándose con las líneas de investigación médica más avanzadas del momento.
-. En 1911, elaboró su tesis doctoral, La sangre en los estados tiroideos. Con Teófilo Hernando inició una larga y fecunda colaboración al codirigir el Manual de Medicina Interna (1916).
-. En 1918, viajó a Francia, para estudiar la etiología de la epidemia gripal que asolaba España y elaborar propuestas para combatirla, entablando amistad con científicos europeos como Fleming.
-. Marañón cifró su comportamiento ético y social a través de la medicina. Su visión humanística según la cual no hay enfermedades sino enfermos, caracterizó su labor docente y clínica. Su compromiso con la justicia social, con la investigación y con la medicina como preocupación nacional se plasmaron en facetas de su vida científica.
-. Dice Marañón: “ La enseñanza ha sido mi vocación “. “España no está en deuda con la civilización; sino con un solo sector de la civilización, con el progreso de las ciencias experimentales”.
.-El Dr. Marañón fue pionero de la endocrinología en nuestro país, su otro ámbito de investigación fue la lucha contra las enfermedades infecciosas Su visión humanista de la medicina, caracterizó su labor docente y clínica. La vastísima obra médica de Marañón, traducida a los idiomas más importantes del mundo, se plasmó en 32 monografías y superó el millar de artículos de investigación. Sus descubrimientos sobre las enfermedades infecciosas, sobre las glándulas de secreción interna, la emoción, la diabetes, la obesidad, sus trabajos sobre biología sexual, descripción del síndrome pluriglandular, sus trabajos sobre insuficiencia suprarrenal, la pituitaria, el tiroides. fisiopatología tiroieda, hipofisaria e hipotalámica, su concepto de edad crítica, sus aportaciones acerca del síndrome A-B-D, entre otras, le otorgaron fama mundial.
-. Fue el primero en demostrar las frecuente aparición de hipertrofia muscular en las piernas de los niños con mixedema e inyectó, experimentalmente, adrenalina para conseguir un estado hipermetabólico en casos de disfunción tiroidea.
-. Gran conocedor del hombre, en el campo de la psicología, sus consideraciones sobre procesos psicológicos y psicopatológicos resultaron fundamentales en temas como las edades, los sueños, el resentimiento, el hambre, la timidez, etc. Contribuyó a establecer la relación entre la psicología y la endocrinología, además de ser el único médico español importante que conoció personalmente a Freud y uno de los pocos biólogos que fue considerado seriamente por los primeros psicoanalistas
-. Para Marañón, como para Freud, la libido (a la que Marañón llamaba "hambre sexual") era un impulso primario. Pero para el endocrinólogo esta energía específica era producida, originalmente, por un fenómeno químico: la irrupción en la sangre de las secreciones internas de las gónadas.. A nivel filosófico, pensó que el psicoanálisis y la endocrinología eran tareas complementarias, ya que las dos perseguían establecer la idiosincrasia del individuo, y que la mayor contribución de Freud a la medicina había sido restaurar una perspectiva humanística.
-. Para Marañón, no es posible imaginar un médico sin cultura humanista. Para él la medicina es una filosofía de vida, y el enfermo precisa más que un técnico, alguien que sepa compartir la angustia que le amenaza. Sin llegar al extremo de la célebre sentencia de Letamendi, “El médico que solo medicina sabe, no sabe ni medicina siquiera”, es evidente que la cultura humanista lo acerca más al hombre, al hacerle más comprensivo, generoso y bueno, y también, más eficiente.
-. Frente al médico enciclopédico, mero archivo de conocimientos, Marañón postula el médico integral, técnico y al mismo tiempo humanista, capaz de comprender la complejidad del drama humano, y de asumir con plenitud su gran responsabilidad, sin olvidar las implicaciones sociales y económicas que acompañan siempre al proceso patológico.