Y otra reflexión sobre el foro.
Cuando los gestores de "Pueblos de España" pusieron en marcha estas páginas, donde tienen cabida todas las poblaciones españolas, supongo que, entre otros, sus objetivos serían que cada pueblo o ciudad tuviesen un soporte -su foro, al igual que Roma tuvo el suyo, salvadas las distancias- en el que dar a conocer sus respectivos lugares: sus recuerdos, sus tradiciones, sus usos y costumbres, en suma; también lugar de encuentro de sus moradores ausentes o presentes, intercambio de vivencias, citaciones, novedades; abrir la patria chica a otros, cruce de pareceres desde el respeto...
Ya comenté que lo difícil es ponerlo en marcha. Si nos ceñimos a nuestra provincia, entrar en el foro de otros pueblos -capital incluída- y encontrarlos tan solitarios como muchos rincones de la provincia es todo uno. Y entonces el círculo se vuelve vicioso: si nadie participa, a qué y para qué y, sobre todo, para quién entrar. Si alguien lo intenta y no obtiene respuesta, lo más probable es que no insista, pues nadie escribe para sí mismo convirtiendo el acto en un monólogo onanista.
Deza, por suerte para los fines del foro, ha encontrado su motor en la figura del abuelo y en su paisano pefeval. Que otros no dezanos les hayamos secundado es mérito de ellos. Y estas páginas de internet ofrecen a los dezanos dispersos por la diáspora la oportunidad de encontrarse, auque sea virtualmente, sin tener esperar a la cita anual de cada verano. Pero el foro de Deza será lo que quieran los dezanos, porque no sólo basta con mantenerlo vivo, sino que hay que alimentarlo para que se conserve. Y si el abuelo, y también pefeval, se cansan algún día y nadie toma el relevo, quien suscribe hará mutis... por el foro. Lógico. Porque entonces entrarían en vigor, con toda justicia, esas expresiones nuestras como la de ser más papista que el papa, o no hay más cera que la que arde, o lo del loco en su casa y el cuerdo en la ajena, o lo de meterse en camisa de once varas, o lo de no darle a uno vela en este entierro. En fin, como veis, nuestro rico idioma castellano da para mucho. Lo dicho: el foro de Deza será lo que los dezanos quieran. Los demás, aunque gustosos, meros invitados.
Un abrazo.
Cuando los gestores de "Pueblos de España" pusieron en marcha estas páginas, donde tienen cabida todas las poblaciones españolas, supongo que, entre otros, sus objetivos serían que cada pueblo o ciudad tuviesen un soporte -su foro, al igual que Roma tuvo el suyo, salvadas las distancias- en el que dar a conocer sus respectivos lugares: sus recuerdos, sus tradiciones, sus usos y costumbres, en suma; también lugar de encuentro de sus moradores ausentes o presentes, intercambio de vivencias, citaciones, novedades; abrir la patria chica a otros, cruce de pareceres desde el respeto...
Ya comenté que lo difícil es ponerlo en marcha. Si nos ceñimos a nuestra provincia, entrar en el foro de otros pueblos -capital incluída- y encontrarlos tan solitarios como muchos rincones de la provincia es todo uno. Y entonces el círculo se vuelve vicioso: si nadie participa, a qué y para qué y, sobre todo, para quién entrar. Si alguien lo intenta y no obtiene respuesta, lo más probable es que no insista, pues nadie escribe para sí mismo convirtiendo el acto en un monólogo onanista.
Deza, por suerte para los fines del foro, ha encontrado su motor en la figura del abuelo y en su paisano pefeval. Que otros no dezanos les hayamos secundado es mérito de ellos. Y estas páginas de internet ofrecen a los dezanos dispersos por la diáspora la oportunidad de encontrarse, auque sea virtualmente, sin tener esperar a la cita anual de cada verano. Pero el foro de Deza será lo que quieran los dezanos, porque no sólo basta con mantenerlo vivo, sino que hay que alimentarlo para que se conserve. Y si el abuelo, y también pefeval, se cansan algún día y nadie toma el relevo, quien suscribe hará mutis... por el foro. Lógico. Porque entonces entrarían en vigor, con toda justicia, esas expresiones nuestras como la de ser más papista que el papa, o no hay más cera que la que arde, o lo del loco en su casa y el cuerdo en la ajena, o lo de meterse en camisa de once varas, o lo de no darle a uno vela en este entierro. En fin, como veis, nuestro rico idioma castellano da para mucho. Lo dicho: el foro de Deza será lo que los dezanos quieran. Los demás, aunque gustosos, meros invitados.
Un abrazo.