Rebaja tu factura AQUÍ

DEZA: El espliego se segaba en agosto y ponían unas calderas...

Los serradores, herreros y cesteros, son oficios que ya no existen en Deza. Los mismo ha pasado con el tejar, los tres zapateros, el estañador, el alpargatero y los dos hojalateros.
Una familia dezana se dedicaba a hacer fideos. Se trasladaban a la casa de la familia que quería los fideos y los hacían allí mismo.
Molinos de harina Los cinco molinos de harina de Deza en los que se molía con el agua de los manantiales, también han desaparecido.
Deza ha tenido tradición vinícola y de sacar aguardiente. Contaban con su propio medidor oficial de vino y de aguardiente.
El espliego se segaba en agosto y ponían unas calderas para quemarlo en la orilla del río Henar. De ahí sacaban la esencia.
Del lino se aprovechaba la fibra y la semilla, así como el cáñamo, del que se obtenía la fibra y los cañamones.

El espliego se segaba en agosto y ponían unas calderas para quemarlo en la orilla del río Henar. De ahí sacaban la esencia.

Esto me parece muy interesante, ¿se podría ampliar la explicación? Por ejemplo como era el proceso. Si puede ser.
Un saludo
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Preguntas, Las Matas, por el proceso del espliego y creo recordar que el abuelo lo detalla perfectamente, mucho mejor de lo que yo pueda hacerlo. Para que no tengas que buscar el link, dado la gran cantidad de los mismos que figuran en este foro, voy a sintetizar en lo que yo recuerdo cómo se realizaba dicho proceso.
A finales de Agosto y primeros de Septiembre, cuando ya se había “rematado de eras”, todos los años se instalaba la caldera junto al río: se trasladaba el gran alambique desde la cochera ... (ver texto completo)
Proceso del espliego.

En atención a nuestra amiga Las Matas de La Nuez de arriba.

El espliego, el tomillo y el romero son tres plantas aromáticas que se dan muy bien en el lado oeste de Deza o sea al poniente, simplemente por el hecho de que son cerros no muy aptos para el cultivo del cereal y hay muchos de ellos que están yermos. Allí se crían a su albedrío y en los años lluviosos se dan muy buenas cosechas que repercuten en la producción de miel y por lo tanto, siempre viene bien a los bolsillos ... (ver texto completo)