Deza es un pueblo precioso. Levántate pronto este verano y pasea por sus calles fresquitas recien salido el sol. Verás la belleza que la envuelve y respirarás a tu placer un aire puro que te hará sentirte feliz. Otro día sales camino de Sanroquillo, mientras el sol está escalando los cerros y aprecia el paisaje y la naturaleza. No tengas en cuenta los chillidos de los cerdos y la colonia que esparcen a su alrededor, olor muy natural a todas luces y porque gracias a ellos podemos saborear el jamón, manjar delicioso, reconocido por todos. Es sólo de paso y por poco tiempo y se puede aguantar perfectamente, sobre todo por aquellos que en otros tiempos los tuvimos de vecinos durante el año entero.
Cuando el sol caliente, te vas a las maravillosas piscinas y resfresca tu cuerpo con un agua pura y cristalina. No tengas miedo de echarte un trago involuntario pues aparte de ser potable, por mucha que bebas no te la acabarás pues nace allí mismo y corre cantarina hasta regar los huertos o perderse en esa cascada impresionante del cuarto molino. De vuelta entra y refresca tu interior en las Ollerías, en la Asociación o en Perrenchín, para abrir boca y coger fuerzas hasta llegar a tu casa. Hazlo así y no te arrepentirás pues pasarás un verano delicioso... Un saludo Deza.
Cuando el sol caliente, te vas a las maravillosas piscinas y resfresca tu cuerpo con un agua pura y cristalina. No tengas miedo de echarte un trago involuntario pues aparte de ser potable, por mucha que bebas no te la acabarás pues nace allí mismo y corre cantarina hasta regar los huertos o perderse en esa cascada impresionante del cuarto molino. De vuelta entra y refresca tu interior en las Ollerías, en la Asociación o en Perrenchín, para abrir boca y coger fuerzas hasta llegar a tu casa. Hazlo así y no te arrepentirás pues pasarás un verano delicioso... Un saludo Deza.