Magnífica tu colección de miniaturas de utensilios agrícolas, Enrique. Eres todo un artista, no un artesano. El artesano tiene oficio y tu solo buscas el arte, el valor creativo y cultural. Reflejas la belleza y la estética en tus trabajos, lo ornamental para disfrute de quienes lo contemplamos y que nos hace recordar aquellos tiempos. Un trabajo en el que no falta un detalle como en este carro en el que has cuidado todo detalle: el protector de la mula de varas, los tentemozos, la máquina, los complementos para enganchar la barriguera, la azofra y los collerones, en fin, todo completo. Cuando comenzaba el acarreo se colocaban el cuadro para portar más carga y el estrinque, por si se atascaba el carro. Se elegían las mulas más idóneas para varas, para tirar con fuerza y la delantera.
El maestro Guerrero, en El Huésped del sevillano, nos ofrece una estampa al respecto en una de sus canciones:
. Para mula de varas,
la Capuchina;
para tirar con alma,
la Peregrina;
la Perla,
a esa da gusto verla
en el barro.
Siempre la mejor mula
me arranca el carro.
Un cordial saludo.
El maestro Guerrero, en El Huésped del sevillano, nos ofrece una estampa al respecto en una de sus canciones:
. Para mula de varas,
la Capuchina;
para tirar con alma,
la Peregrina;
la Perla,
a esa da gusto verla
en el barro.
Siempre la mejor mula
me arranca el carro.
Un cordial saludo.
