Ya estamos metidos en harina, coloquialmente hablando pues ya hemos comenzado los días laborables de un nuevo año. Os habréis fijado que son los mismos que los del año pasado, con madrugones, atascos para ir al trabajo, malas caras y a veces hasta broncas. Por otro lado, hasta incumplimientos de nuestras promesas pues haber como vamos a seguir sin ese cigarrillo después del cafetito de la mañana, además de los que les sigan a lo largo del día y con aquellas palabrotas que se nos escapan, aun sin estar enfadados y de las que habíamos renunciado a pronunciar, solemnemente. En fin; que seguimos con los mismos defectos y caemos en la misma piedra: Somos humanos.
No obstante yo os voy a dar un consejo: "Con constancia y tenacidad se logra todo lo que se desea y la palabra "imposible" no tiene significado. Lo dijo nada menos que un buen escritor llamado Rubén Darío.
El santoral sigue con nombres raros tales como Siridión, Acucio, Argeo, Edelmira y Martiniano, nombre, este último, de un compañero de murió en un vuelo de Valencia a Madrid. Era el radiotelegrafista de aquel Junker 52 que pilotaba el coronel Alfaro y que no llegó a su destino que era la Base Aérea de Cuatro Vientos, en donde esperábamos la tripulación de ocho compañeros más, con el corazón en un puño.
No obstante yo os voy a dar un consejo: "Con constancia y tenacidad se logra todo lo que se desea y la palabra "imposible" no tiene significado. Lo dijo nada menos que un buen escritor llamado Rubén Darío.
El santoral sigue con nombres raros tales como Siridión, Acucio, Argeo, Edelmira y Martiniano, nombre, este último, de un compañero de murió en un vuelo de Valencia a Madrid. Era el radiotelegrafista de aquel Junker 52 que pilotaba el coronel Alfaro y que no llegó a su destino que era la Base Aérea de Cuatro Vientos, en donde esperábamos la tripulación de ocho compañeros más, con el corazón en un puño.