Existen personas que, incapaces de construir, intentan destruir las aportaciones que con sana intención y esfuerzo realizan otros. Digo realizan, porque esos detractores, son incapaces de crear, de buscar lo bueno de las personas, lo positivo, lo sincero, y se muestran críticos con el único fin de subestimar a los demás e intentar hacer patente su ego. Ellos son los verdaderos “iluminados”.
No hagas caso de esa gente, Pepepaco, no empachas a nadie. Tus aportaciones, además de constructivas, siempre las acompañas con mensajes de humor y eres muy bien recibido en este foro; no así otros que solo buscan la discordia. De todo tiene que haber en la viña del Señor.
A éstos les van muy a medida estos versos de Calderón, que reflejan lo que buscamos quienes, con más o menos inteligencia, participamos en este foro:
Aquí, en fin, la cortesía,
el buen trato, la verdad,
la firmeza, la lealtad,
el valor, la bizarría,
el crédito, la opinión…
o aquellos otros del Solitario de Lope:
De cuantas cosas me cansan,
fácimente me defiendo;
pero no puedo guardarme
de los peligros de un necio.
El dirá que yo lo soy,
pero con falso argumento,
que humildad y necedad
no caben en un sujeto.
La diferencia conozco,
porque en él y en mí contemplo,
su locura en su arrogancia,
mi humildad en su desprecio.
O sabe naturaleza
más que supo en otro tiempo,
o tantos que nacen sabios
es porque lo dicen ellos.
Un saludo.
No hagas caso de esa gente, Pepepaco, no empachas a nadie. Tus aportaciones, además de constructivas, siempre las acompañas con mensajes de humor y eres muy bien recibido en este foro; no así otros que solo buscan la discordia. De todo tiene que haber en la viña del Señor.
A éstos les van muy a medida estos versos de Calderón, que reflejan lo que buscamos quienes, con más o menos inteligencia, participamos en este foro:
Aquí, en fin, la cortesía,
el buen trato, la verdad,
la firmeza, la lealtad,
el valor, la bizarría,
el crédito, la opinión…
o aquellos otros del Solitario de Lope:
De cuantas cosas me cansan,
fácimente me defiendo;
pero no puedo guardarme
de los peligros de un necio.
El dirá que yo lo soy,
pero con falso argumento,
que humildad y necedad
no caben en un sujeto.
La diferencia conozco,
porque en él y en mí contemplo,
su locura en su arrogancia,
mi humildad en su desprecio.
O sabe naturaleza
más que supo en otro tiempo,
o tantos que nacen sabios
es porque lo dicen ellos.
Un saludo.