A buen entendedor, pocas palabras bastan
Entender algo es comprenderlo, saber lo que significa. Hasta aquí, bien, ¿verdad?
Pues bueno, aunque esta frase parezca muy evidente (a alguien que comprende bien las cosas, le hacen falta pocas explicaciones), lleva un sentido un tanto oculto que hace que esta frase se utilice tanto en sentido positivo (para alabar o elogiar la inteligencia de alguien), como en sentido negativo (para hacer ver que si alguien no se entera de lo que intentamos explicarle, es porque no quiere o hace como que no quiere entender lo que se le intenta decir).
De esa forma, cuando lo usamos en el sentido positivo, podríamos decir, por ejemplo:” En cuanto se lo comenté a Pedro lo entendió enseguida y es que a buen entendedor, pocas palabras bastan”, es decir, con las pocas palabras con las que se las explicaron y con su inteligencia o con su conocimiento sobre el tema que se estaba tratando, a Pedro le fue suficiente para comprender perfectamente el asunto.
Sin embargo, también lo podríamos usar para llamar la anteción de alguien a quien intentamos decirle algo y no se entera o hace como que no se entera. Así podríamos decir: “chico, pues a buen entendedor pocas palabras bastan”, como diciendo, si no te enteras es porque no quieres porque más claro no lo puedo explicar.
Pues eso, como sé que vosotros ya sois muy buenos entendedores y que os basta con pocas palabras, no me voy a extender más.
Que tengais una buena tarde!
Entender algo es comprenderlo, saber lo que significa. Hasta aquí, bien, ¿verdad?
Pues bueno, aunque esta frase parezca muy evidente (a alguien que comprende bien las cosas, le hacen falta pocas explicaciones), lleva un sentido un tanto oculto que hace que esta frase se utilice tanto en sentido positivo (para alabar o elogiar la inteligencia de alguien), como en sentido negativo (para hacer ver que si alguien no se entera de lo que intentamos explicarle, es porque no quiere o hace como que no quiere entender lo que se le intenta decir).
De esa forma, cuando lo usamos en el sentido positivo, podríamos decir, por ejemplo:” En cuanto se lo comenté a Pedro lo entendió enseguida y es que a buen entendedor, pocas palabras bastan”, es decir, con las pocas palabras con las que se las explicaron y con su inteligencia o con su conocimiento sobre el tema que se estaba tratando, a Pedro le fue suficiente para comprender perfectamente el asunto.
Sin embargo, también lo podríamos usar para llamar la anteción de alguien a quien intentamos decirle algo y no se entera o hace como que no se entera. Así podríamos decir: “chico, pues a buen entendedor pocas palabras bastan”, como diciendo, si no te enteras es porque no quieres porque más claro no lo puedo explicar.
Pues eso, como sé que vosotros ya sois muy buenos entendedores y que os basta con pocas palabras, no me voy a extender más.
Que tengais una buena tarde!