Pues sí, Félix, mi tocayo que responde por Celtíbero soriano, también recurre al Comas, más que conocido por todos los sorianos de nuestra época. Su fama llegó hasta nuestros pueblos y creo que a más de un dezano le sonará. Era éste un panadero de buen color que, a pesar de los durísimos inviernos sorianos de entonces -ahora no parecen tan duros-, solía salir del horno donde trabajaba con un simple mono azul y, enfilando hacia el río, llegaba a las aguas del padre Duero donde se metía después de despojarse de tan leve indumentaria. Más de una vez, y más de dos, y más de tres, hubo de romper el hielo con la piedra más gorda que encontraba, dado su grosor, para tirarse de cabeza al agua, pues han de saber los no sorianos que el Duero se hiela. Y la fama del Comas llegó hasta la prensa nacional.