LOS GIROS DEL RÍO UCERO
Viene cruzando caminos
para llegar hasta el Duero,
viviendo signos divinos
con ritmo de romancero.
Sus aguas hoy cristalinas
se las lleva el río Duero,
detrás quedan las colinas
que adornan al río Ucero.
Álamos de los caminos
pueblos que viven silencios,
su Ribera tiene signos
de no conocer desprecios,
La Cuesta de La Galiana
con su cuna de aguacero,
hace sentir la mañana
y brillar al río Ucero.
El río Lobos le entrega
el caudal de su lamento,
y con sus aguas se riega
huertas que son sentimiento.
En Las Murallas del Burgo
camina lento el Ucero,
en sus cortes siento el yugo
que dan sus piedras de acero.
Con sonidos de campanas
los vientos le van meciendo,
en sus bonitas mañanas
parece que va corriendo.
El Ucero va brillando
con su sonido altanero,
mientras que va comentando
ser afluente del Duero.
El Abión le hace fuerte
con su corriente sencilla.
así le ofrece aliciente
a este río de Castilla.
G X Cantalapiedra.
Viene cruzando caminos
para llegar hasta el Duero,
viviendo signos divinos
con ritmo de romancero.
Sus aguas hoy cristalinas
se las lleva el río Duero,
detrás quedan las colinas
que adornan al río Ucero.
Álamos de los caminos
pueblos que viven silencios,
su Ribera tiene signos
de no conocer desprecios,
La Cuesta de La Galiana
con su cuna de aguacero,
hace sentir la mañana
y brillar al río Ucero.
El río Lobos le entrega
el caudal de su lamento,
y con sus aguas se riega
huertas que son sentimiento.
En Las Murallas del Burgo
camina lento el Ucero,
en sus cortes siento el yugo
que dan sus piedras de acero.
Con sonidos de campanas
los vientos le van meciendo,
en sus bonitas mañanas
parece que va corriendo.
El Ucero va brillando
con su sonido altanero,
mientras que va comentando
ser afluente del Duero.
El Abión le hace fuerte
con su corriente sencilla.
así le ofrece aliciente
a este río de Castilla.
G X Cantalapiedra.