SORIA EN LOS SILENCIOS DE LA NOCHE
Las noches se van fundiendo
entre los bellos pinares,
son ecos que repitiendo
se hacen grandes sus lugares.
Voces de lobos hambrientos
que claman sus soledades,
ecos que llevan los vientos
y se vuelven más verdades.
La noche guarda misterios
con sus fríos tenebrosos,
y tiemblan los cementerios
en momentos lagrimosos.
Los zorros vienen marcando
la belleza del terreno,
en sus ojos va brillando
su reflejo que no es bueno.
Estas noches dislocadas
de animales sin templanza,
son misiones alcanzadas
que tienen siempre su danza.
Conejos por las cunetas
de las vías secundarias,
que en sus horas más inquietas
ves carreras temerarias.
Noches de muchos fantasmas
con jabalís de respeto,
cuando en la noche ves camas
existe un camino inquieto.
Noches de Soria con miedo,
sin esperar alegrías,
alguien nos habló del credo
y de raras armonías.
Noches que dejan sus huellas
entre pinares altivos,
donde a veces las estrellas
tienen bonitos motivos.
G X Cantalapiedra.
Las noches se van fundiendo
entre los bellos pinares,
son ecos que repitiendo
se hacen grandes sus lugares.
Voces de lobos hambrientos
que claman sus soledades,
ecos que llevan los vientos
y se vuelven más verdades.
La noche guarda misterios
con sus fríos tenebrosos,
y tiemblan los cementerios
en momentos lagrimosos.
Los zorros vienen marcando
la belleza del terreno,
en sus ojos va brillando
su reflejo que no es bueno.
Estas noches dislocadas
de animales sin templanza,
son misiones alcanzadas
que tienen siempre su danza.
Conejos por las cunetas
de las vías secundarias,
que en sus horas más inquietas
ves carreras temerarias.
Noches de muchos fantasmas
con jabalís de respeto,
cuando en la noche ves camas
existe un camino inquieto.
Noches de Soria con miedo,
sin esperar alegrías,
alguien nos habló del credo
y de raras armonías.
Noches que dejan sus huellas
entre pinares altivos,
donde a veces las estrellas
tienen bonitos motivos.
G X Cantalapiedra.