FEBRERO POR LAS TIERRAS DEL DUERO
Si me hablan del romancero
en esas tierras hermosas,
se escucha siempre un te quiero
entre las frases dichosas.
Mientras le miro a febrero
con sus vientos invernales,
que suele ser como enero
entre fríos naturales.
En estas tierras del Duero
entre nieblas congeladas,
se hace bueno el romancero
en las noches más heladas.
Los almendros esperando
sus brotes con alegría,
y el campo viene pensando
en recibir su armonía.
El Duero serio camina
con sus rimas de labranza,
y su belleza examina
sin querer hacer balanza.
Aguas frías de mi Duero
que estimulan la templanza,
sin temer a este febrero
que no sabe de bonanza.
Sin lluvias, aunque sin riegos,
este mes no da esperanzas,
habrá quien suelte sus ruegos
temiendo sus serias danzas.
Febrero deja sus sombras
en las laderas heladas,
y los pájaros se asombran
entre sendas congeladas.
El Duero va caminando
entre sus grises andadas,
y en Soria viene dejando
muchas noches mal pasadas.
G X Cantalapiedra.
Si me hablan del romancero
en esas tierras hermosas,
se escucha siempre un te quiero
entre las frases dichosas.
Mientras le miro a febrero
con sus vientos invernales,
que suele ser como enero
entre fríos naturales.
En estas tierras del Duero
entre nieblas congeladas,
se hace bueno el romancero
en las noches más heladas.
Los almendros esperando
sus brotes con alegría,
y el campo viene pensando
en recibir su armonía.
El Duero serio camina
con sus rimas de labranza,
y su belleza examina
sin querer hacer balanza.
Aguas frías de mi Duero
que estimulan la templanza,
sin temer a este febrero
que no sabe de bonanza.
Sin lluvias, aunque sin riegos,
este mes no da esperanzas,
habrá quien suelte sus ruegos
temiendo sus serias danzas.
Febrero deja sus sombras
en las laderas heladas,
y los pájaros se asombran
entre sendas congeladas.
El Duero va caminando
entre sus grises andadas,
y en Soria viene dejando
muchas noches mal pasadas.
G X Cantalapiedra.