LAS SOLEDADES DEL UCERO
Brisas cargadas de fríos
quieren rondar al Ucero,
es tiempo de escalofríos
y de viento pasajero.
El Ucero va sintiendo
sus soledades del alma,
mientras vemos padeciendo
como se respira calma.
Hay momentos importantes
donde las brisas despliegan,
con paisajes trashumantes
que se borraron las siegas.
La Ribera del Ucero
se siente muy solitaria,
el viento corre ligero
con su brisa milenaria.
Cuando buscas soledades
que te llenen sus palabras,
prefieres vivir verdades
aunque vivas entre cabras.
Las soledades se sienten
a veces en la distancia,
muchas veces se presienten
sin ser jamás ignorancia.
Soledades del Ucero
que buscan ciertas templanzas,
muy cerca camina el Duero
sin querer hacer balanzas.
Hay noches que se reflejan
en El Ucero sus aguas,
sin saber si son las quejas
de algunas cerradas fraguas.
Las soledades se viven
entre signos de distancia,
muchos recuerdos perviven
sin entender de arrogancia.
G X Cantalapiedra.
Brisas cargadas de fríos
quieren rondar al Ucero,
es tiempo de escalofríos
y de viento pasajero.
El Ucero va sintiendo
sus soledades del alma,
mientras vemos padeciendo
como se respira calma.
Hay momentos importantes
donde las brisas despliegan,
con paisajes trashumantes
que se borraron las siegas.
La Ribera del Ucero
se siente muy solitaria,
el viento corre ligero
con su brisa milenaria.
Cuando buscas soledades
que te llenen sus palabras,
prefieres vivir verdades
aunque vivas entre cabras.
Las soledades se sienten
a veces en la distancia,
muchas veces se presienten
sin ser jamás ignorancia.
Soledades del Ucero
que buscan ciertas templanzas,
muy cerca camina el Duero
sin querer hacer balanzas.
Hay noches que se reflejan
en El Ucero sus aguas,
sin saber si son las quejas
de algunas cerradas fraguas.
Las soledades se viven
entre signos de distancia,
muchos recuerdos perviven
sin entender de arrogancia.
G X Cantalapiedra.