EL BURGO DE OSMA: VISITANDO EL BURGO DE OSMA, HOY....

VISITANDO EL BURGO DE OSMA, HOY.
Ente piedras milenarias y sus ríos placenteros, sin fechas extraordinarias nadie me habló de dineros. Sobre sus calles serenas anduve sin tener miedo, El Burgo tiene horas buenas que tienen siempre su enredo. Caminé por entre piedras hasta el Puente del Suicida, allí no crecen las hiedras, pienso en algún herbicida. El Ucero flameante siempre viendo las murallas. El Abión expectante va recordando batallas. Estos paisajes son dignos de guardarlos en la mente, hacen preciosos caminos y el sol luce de repente. Pasear sin grandes prisas entre sonidos del agua, y ver que corren las brisas sin encontrar ni una fragua. Sin precisar mucho abrigo íbamos los paseantes, el frío no es un castigo si llevas ropa al instante. Los arboles van perdiendo su color de primavera, las hojas se van poniendo el marrón que desespera. Estas heladas pasadas, que dormitaron las hierbas, son duras encrucijadas de las noches que son ciegas. Los fríos vienen deprisa desde las sierras vecinas, a veces llegan con prisa asustando a las colinas. El Burgo sigue camino esperando a la autopista, nadie conoce el destino aunque seguimos su pista. El Duero sigue esperando esa esperada autopista, que parece ir dormitando sin saber que contratista. Obras que vemos pendientes entre laderas marrones, que parecen tener dientes y rompen los corazones. Sombras de viejas leyendas corren por esa autovía, al tiempo vemos sus sendas que no saben de su día. La Catedral con su Torre, es el testigo del tiempo, el viento siempre recorre algunos viejos conventos. El Burgo siempre te espera entre sus brazos abiertos, la calma no desespera ni a los personajes muertos. Sentir el Burgo con alma es vivir su fantasía, la ciudad te envuelve en calma mientras gozas de armonía. G X Cantalapiedra..