ESTAS FECHAS DE PANDEMIA EN EL BURGO
La pandemia va creciendo por los Campos de Castilla, dicen que viene ofreciendo su maldad que no es sencilla.
Nos comentan muchas voces que la epidemia se extiende, y viene dejando roces sin entender si comprende.
Los hospitales se llenan de sus males tan profundos, amargando muchas cenas en sus pasos tan rotundos.
El Burgo viene pensando que la epidemia nos daña, y su gente va explorando que recorre toda España.
Estos males tan malditos no conocen las bondades, a veces dejan los gritos en duras enfermedades.
La pandemia no respeta ni quiere saber de llantos, ella llega siempre inquieta arrastrando desencantos.
No valen viejas murallas para frenar tantos males, estas son serias batallas que nunca serán normales.
Cuando llegan ciertas noches sufren muchos corazones, que quieren ponerle broches a estos virus tan ramplones.
Las soledades se amargan al ver la pandemia viva, sus pasos siempre se alargan mientras el llanto se activa.
La pandemia va en silencio sin meter apenas ruido, dejando el duro desprecio al corazón más sentido.
El Burgo de Osma sintiendo otros tiempos temblorosos, que les dejaron sufriendo entre muertos dolorosos.
La pandemia va marcando muchos de sus nuevos muertos, ella marcha caminando en los momentos inciertos.
No vale cerrar ventanas ni pensar en sentimientos, ni gritar por las mañanas para ahuyentar sufrimientos.
La memoria se motiva para activar más alientos, en cualquier fecha festiva el virus rompe contentos.
Mascarillas y distancia en estos duros momentos, sin buscar nunca arrogancia no despreciemos los vientos.
Sin buscar nuevos caminos ni precisar los lamentos, sin pensar en adivinos logremos viejos inventos.
G X Cantalapiedra.
La pandemia va creciendo por los Campos de Castilla, dicen que viene ofreciendo su maldad que no es sencilla.
Nos comentan muchas voces que la epidemia se extiende, y viene dejando roces sin entender si comprende.
Los hospitales se llenan de sus males tan profundos, amargando muchas cenas en sus pasos tan rotundos.
El Burgo viene pensando que la epidemia nos daña, y su gente va explorando que recorre toda España.
Estos males tan malditos no conocen las bondades, a veces dejan los gritos en duras enfermedades.
La pandemia no respeta ni quiere saber de llantos, ella llega siempre inquieta arrastrando desencantos.
No valen viejas murallas para frenar tantos males, estas son serias batallas que nunca serán normales.
Cuando llegan ciertas noches sufren muchos corazones, que quieren ponerle broches a estos virus tan ramplones.
Las soledades se amargan al ver la pandemia viva, sus pasos siempre se alargan mientras el llanto se activa.
La pandemia va en silencio sin meter apenas ruido, dejando el duro desprecio al corazón más sentido.
El Burgo de Osma sintiendo otros tiempos temblorosos, que les dejaron sufriendo entre muertos dolorosos.
La pandemia va marcando muchos de sus nuevos muertos, ella marcha caminando en los momentos inciertos.
No vale cerrar ventanas ni pensar en sentimientos, ni gritar por las mañanas para ahuyentar sufrimientos.
La memoria se motiva para activar más alientos, en cualquier fecha festiva el virus rompe contentos.
Mascarillas y distancia en estos duros momentos, sin buscar nunca arrogancia no despreciemos los vientos.
Sin buscar nuevos caminos ni precisar los lamentos, sin pensar en adivinos logremos viejos inventos.
G X Cantalapiedra.