ERA AMANTE DEL BURGO DE OSMA
Toda su vida pensando en poder volver un día, su mujer le fue animando, siendo su fiel compañía. Cada noche lo soñaba era grande su alegría, sobre su mente llevaba una perfecta armonía, Caminaba a jubilarse soñando que algo sentía, era dura la jornada que la vida le imprimía. Desde joven fue su meta, volver al Burgo algún día, tenía su vida inquieta y por ella se perdía. Más la vida pone freno sin saber por qué motivo, y te suelta su veneno en el día más festivo. Un accidente casero su cuerpo le removía, y aunque quiso andar ligero un infarto le venía. Le llevaron muy deprisa al hospital de su barrio, y él notó que su sonrisa se perdía en un calvario. Intentaron darle vida sin poder nunca salvarlo, era tan grande su herida que tuvo el cuerpo temblando, Se le marchaba la vida sin tener a nadie ha lado, era gris su despedida en un mundo controlado. Su familia desde fuera todos estaban temblando, era dura aquella espera si la muerte va rondando. Les avisaron con pena sin explicar el calvario, muchas veces ves arena en el penoso salario. El Burgo no estaba lejos nadie comento llevarlo, una voz muy femenina quiso en su tierra enterrarlo. La distancia de la muerte puede ser camino amargo, a veces vale la suerte de vivir un tiempo largo. Hay silencios que se rompen y se quedan esperando, muchas historias se esconden mientras caminan llorando. Era el final de un camino que nunca quiso olvidarlo, nadie se sienta adivino más debemos de cuidarlo. No valen ramos de flores ni rosas sobre el armario, existen ciertos dolores que pueden ser un calvario. Las noches te dan estrellas que el cielo parece largo, no existen las muertes bellas ni el morir tiene recargo. G X Cantalapiedra.
Toda su vida pensando en poder volver un día, su mujer le fue animando, siendo su fiel compañía. Cada noche lo soñaba era grande su alegría, sobre su mente llevaba una perfecta armonía, Caminaba a jubilarse soñando que algo sentía, era dura la jornada que la vida le imprimía. Desde joven fue su meta, volver al Burgo algún día, tenía su vida inquieta y por ella se perdía. Más la vida pone freno sin saber por qué motivo, y te suelta su veneno en el día más festivo. Un accidente casero su cuerpo le removía, y aunque quiso andar ligero un infarto le venía. Le llevaron muy deprisa al hospital de su barrio, y él notó que su sonrisa se perdía en un calvario. Intentaron darle vida sin poder nunca salvarlo, era tan grande su herida que tuvo el cuerpo temblando, Se le marchaba la vida sin tener a nadie ha lado, era gris su despedida en un mundo controlado. Su familia desde fuera todos estaban temblando, era dura aquella espera si la muerte va rondando. Les avisaron con pena sin explicar el calvario, muchas veces ves arena en el penoso salario. El Burgo no estaba lejos nadie comento llevarlo, una voz muy femenina quiso en su tierra enterrarlo. La distancia de la muerte puede ser camino amargo, a veces vale la suerte de vivir un tiempo largo. Hay silencios que se rompen y se quedan esperando, muchas historias se esconden mientras caminan llorando. Era el final de un camino que nunca quiso olvidarlo, nadie se sienta adivino más debemos de cuidarlo. No valen ramos de flores ni rosas sobre el armario, existen ciertos dolores que pueden ser un calvario. Las noches te dan estrellas que el cielo parece largo, no existen las muertes bellas ni el morir tiene recargo. G X Cantalapiedra.