Factura rebajada un 25%

EL BURGO DE OSMA: AQUEL PASTOR PORTUGUES EN SORIA...

AQUEL PASTOR PORTUGUES EN SORIA
Aquel hombre venido de Portugal, para pastorear por la comarca del Burgo de Osma, sentía la necesidad de ir a bailar, y en cada momento estaba pendiente de todas las fiestas de los pueblos de la comarca, y era su vicio y animo para poder divertirse en las noches sobre todo veraniegas, Llegando a ganar algún premio de baile en donde participaba, En los campos con su rebaño llevaba encima un aparato de radio, donde podía escuchar música y a veces bailar a su ritmo, Este hombre se sentía bailarín, y parece ser que sus ovejas y corderos acompañaban a sus pasos de bailarín portugués, una noche de las que no había fiestas en la comarca, se decidió ir a bailar al Burgo de Osma, con su esposa y compañera de baile, a la discoteca, y demostró ser un hombre divertido, aunque pasando los cuarenta años, que en aquel ambiente era ser un carroza como alguien le insinuó, Más este hombre pastor de profesión, dejo sus huellas de bailarín, y lo mismo su esposa, las envidias, nunca fueron buenas, y los solteros sin pareja dejaban sus palabras torpes, pensando que el reloj de la vida no perdona, Más este hombre rompió moldes, y continuo bailando hasta que un día del mes de diciembre, decidió marchar de nuevo a su país Portugal, y en su tierra seguir bailando sin reparos, Hay seres humanos que llevan una aureola de ser triunfadores, y a veces encuentran la envidia por donde caminan a diario, es una pena las criticas destructivas de algunos seres humanos, que según ellos les gustaría poner reglas a todo su alrededor, anulando la alegría de personas validas, que dejan sus huellas por donde quiera que pasan. Da lo mismo ser blanco que negro que amarillo, los censores están en todas partes, para si pueden meter baza en donde les dejen, se ve que la conciencia con el frío se queda congelada, y no pueden entender que los años no solo son un tope, si no a veces una alegría en poder cumplirlos, y demostrar que sigues con ganas de vivir a tope. Y el que no lo sienta así peor para él. Ya dice un refrán castellano. “español pudo más tu envidia que tu honor”. La envidia es el pecado capital del español. G X Cantalapiedra.