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UNA TARDE ME CONTARON
Era una tarde del mes de agosto de hace 50, años, me contaron que Jesucristo se vistió de mendigo, y vino a pedir limosna a Gormaz, cuando este Castillo Fortaleza y el pueblo de Gormaz, tenían 14,000, habitantes en total, Parece ser que Jesucristo vestido de hombre de aquella época, con aspecto de pobreza, anduvo pidiendo limosna entre aquella gente medio guerrera y campesina, sin recibir buen resultado de toda la mañana entera mendingando, tan solo consiguió que catorce personas le dieran algo de limosna. Por eso al pasar por debajo de dicha Fortaleza, y habiendo pasado de la Villa de Gormaz, miro hacia la parte de arriba de la monumental muralla, y exclamo. ¡Hay Gormaz Gormaz, de catorce mil habitantes en catorce te quedaras! Parece ser que la rendición de cuentas de Jesucristo, resulto con los años ser cierta, y aquellas palabras que fueron como una exclamación o maldición, se hicieron realidad con el paso de los años, Una Fortaleza Califal que tiene más de un kilómetro de muralla, un templo el de San Miguel, del siglo X, y una Villa que sigue a la sombra de esa Fortaleza, que un día Almanzor domino, en su camino hacia Galicia, y de la que fue el gobernante Rodrigo Diaz de Vivar. “El Cid Campeador”. Hoy día solo tiene 14 habitantes, Nadie sabe el por qué de esa historia, pero en los pueblos de alrededor todos parece que la conocen, y les parece hasta cierta, Yo no quiero afirmarlo ni negarlo, pero algo tiene el agua cuando se bendice. Estas historias como otras, alguien algún día las contó y ahí siguen por esas tierras sorianas. G X Cantalapiedra.
Era una tarde del mes de agosto de hace 50, años, me contaron que Jesucristo se vistió de mendigo, y vino a pedir limosna a Gormaz, cuando este Castillo Fortaleza y el pueblo de Gormaz, tenían 14,000, habitantes en total, Parece ser que Jesucristo vestido de hombre de aquella época, con aspecto de pobreza, anduvo pidiendo limosna entre aquella gente medio guerrera y campesina, sin recibir buen resultado de toda la mañana entera mendingando, tan solo consiguió que catorce personas le dieran algo de limosna. Por eso al pasar por debajo de dicha Fortaleza, y habiendo pasado de la Villa de Gormaz, miro hacia la parte de arriba de la monumental muralla, y exclamo. ¡Hay Gormaz Gormaz, de catorce mil habitantes en catorce te quedaras! Parece ser que la rendición de cuentas de Jesucristo, resulto con los años ser cierta, y aquellas palabras que fueron como una exclamación o maldición, se hicieron realidad con el paso de los años, Una Fortaleza Califal que tiene más de un kilómetro de muralla, un templo el de San Miguel, del siglo X, y una Villa que sigue a la sombra de esa Fortaleza, que un día Almanzor domino, en su camino hacia Galicia, y de la que fue el gobernante Rodrigo Diaz de Vivar. “El Cid Campeador”. Hoy día solo tiene 14 habitantes, Nadie sabe el por qué de esa historia, pero en los pueblos de alrededor todos parece que la conocen, y les parece hasta cierta, Yo no quiero afirmarlo ni negarlo, pero algo tiene el agua cuando se bendice. Estas historias como otras, alguien algún día las contó y ahí siguen por esas tierras sorianas. G X Cantalapiedra.