Los saludo con mucha alacridad, desde
mar del plata,
argentina, apreciando y disfrutando, esas confluencias de piedades y devociones marianas, folklores y
tradiciones y genealogías que descollan en vuestra ALAMEDA...
Yo los conocí por mi devoto interés por la
Virgen y Bernardo, ya que esa ha sido la primer
puerta por la que he entrado a este sitio.