LA RASA COMO TESTIGO
La Rasa como testigo
tiene sus huellas grabadas,
la guerra como castigo
de sus bellas madrugadas.
El Duero guarda silencio
sin entender de razones,
aunque nunca hizo desprecio
ni cobijo maldiciones.
El eco de los motores
dicen que va resonando,
y recuerda los dolores
de aquello que fue arrasando.
La Rasa vive esperanza
mientras crecen los manzanos,
el tiempo trazo balanza
entre los seres humanos.
Los motores van rugiendo
en sus rasos permanentes,
y algunos los van sintiendo
con sus ecos trascendentes.
.
Los enebros muy tranquilos
no quieren romper barreras,
de lejos miran los silos
esperando primaveras.
El tren se paso de largo
sin bloquear carreteras,
La Rasa no quiere embargo
ni quiere marcar esperas.
Caminos entre distancias
que no conocen fronteras,
La Rasa tuvo arrogancias
con amores muy de veras.
Testigo de aquel pasado
donde el pensamiento vuela,
el hombre si es acosado
a veces se vuelve fiera.
G X Cantalapiedra.
La Rasa como testigo
tiene sus huellas grabadas,
la guerra como castigo
de sus bellas madrugadas.
El Duero guarda silencio
sin entender de razones,
aunque nunca hizo desprecio
ni cobijo maldiciones.
El eco de los motores
dicen que va resonando,
y recuerda los dolores
de aquello que fue arrasando.
La Rasa vive esperanza
mientras crecen los manzanos,
el tiempo trazo balanza
entre los seres humanos.
Los motores van rugiendo
en sus rasos permanentes,
y algunos los van sintiendo
con sus ecos trascendentes.
.
Los enebros muy tranquilos
no quieren romper barreras,
de lejos miran los silos
esperando primaveras.
El tren se paso de largo
sin bloquear carreteras,
La Rasa no quiere embargo
ni quiere marcar esperas.
Caminos entre distancias
que no conocen fronteras,
La Rasa tuvo arrogancias
con amores muy de veras.
Testigo de aquel pasado
donde el pensamiento vuela,
el hombre si es acosado
a veces se vuelve fiera.
G X Cantalapiedra.